ElPozo sucumbió ante el Inter en el primer encuentro de la Supercopa por 2-5 en un encuentro en el que todo el buen trabajo realizado hasta entonces por los pupilos de Duda quedó en nada tras un momento de desconexión, justo al final del choque, en el que los locales encajarían tres goles para dejar sus aspiraciones de conquistar el título en un horizonte muy lejano. Y es que, habida cuenta de que los goles en campo contrario valen doble, se antoja una empresa muy difícil la que le espera a ElPozo.

De la primera parte se podría decir que, si bien terminó con empate a uno en el luminoso, ésta dejó dos lecturas esperanzadoras. La primera es que ElPozo siempre es competitivo, aunque las lesiones de dos estandarte como Miguelín y Pito lastren parte del potencial del club de la capital del Segura. Y la segunda es que la cantera es una apuesta segura pues los Darío, Cobarro, García y compañía jugaron sin miedo y, lo que es más importante, disfrutaron frente al todopoderoso Inter. Quien sabe si llegarán a ser estrellas, lo único cierto por el momento es que son jugadores tremendamente válidos para la primera división y el futuro, que est´´a en sus manos, da aliento a los aficionados tras lo visto en el partido de ayer.

Sobre la pista se vio a un Inter muy seguro en los compases iniciales del choque, dominando al cuadro local y disfrutando de varias ocasiones que Fabio logr´´o desviar con apuros. ElPozo se mostraba nervioso, incapaz de controlar un esférico que parecía quemarle y que entregaba a su rival con pases imposibles o con pérdidas. No llegó a la meta rival hasta el minuto cinco, pero cuando lo hizo pareció despertar. Los de Duda, jaleados por los aficionados -especialmente los más jóvenes- encerraron al actual campeón ea liga en su campo y empezaron a de. Sin embargo, cuando mejor jugaba el cuadro local llegó gol del Inter. gracias a Elisandro, un pívot de una envergadura similar a la de un armario. El golpe asestado, duro por la forma en que lleg´´o, no hizo mella en la moral de los locales. Y es que tan solo dos minutos después conseguirían el empate tras una fantástica jugada de estrategia en la que Andresito soltó un zapatazo que se coló en el fondo de las mallas tras tocar en el larguero.

El segundo tiempo mostró igualdad hasta que Daniel lanzó un disparo que tocó Fabio pero que no pudo desviar la trayectoria lejos de la portería. Volvía a ponerse por delante el Inter y, de nuevo, tocaba remar para ElPozo. El cuadro de Duda, otra vez, dio un paso al frente y comenzó a gozar de ocasiones que no lograba materializar. Habida cuenta de que los goles en campo contrario tienen un valor doble, la situación era complicada. Y peor se tornó el horizonte murciano cuando se lesionó Andresito, dejando al conjunto murciano en cuadro. Duda solo tenía en su fondo de armario a cinco jugadores de la primera plantilla y a los pupilos de la fábrica, insuficientes recursos para lo que quedaba por disputarse.

Sin embargo, llegaron entonces los mejores minutos para ElPozo culminados con un gol del canterano Álex García que enloqueció al Palacio. El vendaval que recibió el Inter por parte de los pupilos de la escuela de ElPozo estaba siendo para enmarcar, y así lo reconocía la gente, entregada sin condiciones a los suyos. Pero el cruel destino y un momento de debilidad hizo que todo lo trabajado se fuese al traste. Bastó poco más de un minuto, algo más de sesenta segundos, para que el Inter diese un puñetazo sobre la mesa y anotase tres goles que dejan al eliminatoria, salvo milagro, casi resuelta el choque. Nadar para morir en la orilla, que suele decirse. Pero queda la esperanza de otro partido, que se jugará el sábado. Esta vez el equipo de la cantera no ganó al equipo de la cartera, pero motivos hay para soñar con todo en un futuro no muy lejano.