A finales del siglo XIX, un médico escocés llamado Williams Alexander Mackay emigró a Huelva para trabajar en las minas de Río Tinto. Allí introdujo el fútbol en la comarca, un deporte que en esa época ya se desarrollaba en las islas británicas pero era totalmente desconocido más allá de sus fronteras. Así fue como se gestó la creación del primer club español, el Recreativo de Huelva, en 1889. 127 años después, el decano de nuestro fútbol ha atravesado recientemente los peores momentos de su larga historia, y su sola continuidad es casi un milagro. El próximo sábado, en el estadio Cartagonova, los onubenses inician el trayecto para reverdecer viejos laureles y regresar a los escenarios que su pasado y su afición se merecen.

Su primer ascenso a la máxima categoría se hizo de rogar hasta 1978. La década pasada fue la mejor en ese aspecto de la entidad onubense, pero tras su descenso en la 2008-09 comenzó la crisis económica y deportiva. El resto del cuento se resume en concursos de acreedores, deudas con hacienda y futbolistas y empleados sin cobrar. Hasta que de repente, a finales del mes de junio, apareció un nuevo inversor: Juanma López, ex defensa del Atlético de Madrid y medalla de oro en los Juegos Olímpicos de 1992. El madrileño es la cabeza visible de un grupo gestor que ha tomado las riendas del equipo para sanear las cuentas y devolverlo al fútbol profesional. Manolo Zambrano continúa al frente del consejo de administración del cual fue nombrado presidente en octubre de 2016, cuando el ayuntamiento de Huelva expropió las acciones del anterior dueño, Manuel Comas.

Mientras se sanean las cuentas, el club ha montado un nuevo proyecto deportivo para no pasar los apuros del curso pasado, cuando no certificaron su permanencia en Segunda B hasta la penúltima jornada. La última, ya con el trabajo hecho, visitaron el Cartagonova cuando los de Monteagudo aún no tenían el billete para el play-off. El partido acabó en un pobre empate a cero que les dio a los albinegros el pase para la fase de ascenso.

Javier Casquero ha sustituido a Juan Manuel Pavón como técnico del conjunto blanquiazul. El ex jugador del Getafe lidera un equipo que ha renovado gran parte de la plantilla este verano. Los delanteros Santi Luque (cedido por el Lorca) y Boris Garrós (máximo goleador del grupo III la temporada pasada con el Gavà) han sido los últimos en incorporarse a la disciplina del Recreativo. Con ellos son ya doce los jugadores que ha fichado el club este verano. Antes se unieron Carlos Calvo (Cádiz), Julio (Sporting B), Carlos Lazo (Real Madrid Castilla), David Segura (Cabecense), Casado (Numancia), Djak Traoré (Girona), Jonathan Vila (Oviedo), Diego Jiménez (Llagostera) y Sergio González (Sanse). Sin embargo, este curso la afición echará de menos a uno de los futbolistas más queridos en el Nuevo Colombino: el mediocentro Jesús Vázquez, que puso fin a su carrera deportiva después de nueve temporadas en el Recreativo.

Sí continua en el conjunto onubense el centrocampista Antonio Núñez, que hace más de una década jugó una temporada con el primer equipo del Real Madrid y luego ganó la Champions League con el Liverpool en 2005. Esos tiempos gloriosos quedan muy lejos, pero Núñez, a sus treinta y ocho primaveras, lleva ya cuatro temporadas siendo el líder en el campo de los albiazules.

A pesar de los vaivenes del club, la afición del Recreativo ha demostrado ser una de las más fieles de todo el panorama nacional. Los problemas en los despachos obligaron a la entidad a retrasar el inicio de la campaña de abonados, pero en apenas una semana desde su lanzamiento rondan ya los 4.000 carnés vendidos. Todo indica que el decano está mucho más vivo de lo que algunos pensaban. El Cartagena será el primero en comprobarlo.