Los acuerdos de filialidad de los equipos de fútbol se han convertido siempre en Cartagena y en el FC Cartagena en un auténtico engorro para sus dirigentes, por los continuos problemas que han mantenido con tal o cual equipo para encontrar el respaldo al que les obliga la RFEF para poder competir. Aunque probablemente el problema no era el Efesé, ni el Algar últimamente, sino la nula capacidad demostrada por todos y cada uno de los presidentes que han dirigido esta entidad para crear, proteger, mantener y dar esperanza a sus propias bases, algo que sí que viene sucediendo desde hace dos temporadas y que en la última se ha convertido en un proyecto tan notable como prometedor.
El Cartagena B, que el pasado año militaba en Primera Regional, se encuentra a un paso de escalar a Tercera División. En dos años, los futbolistas entrenados hasta hace unas pocas semanas por Víctor Basadre han dado un salto y a punto están de dar el siguiente, a Tercera, si el Lorca Deportiva es capaz de ganar su eliminatoria de fase de ascenso este fin de semana en su campo. «Vamos como un cohete» dice, orgulloso, Isidoro García, responsable de las categorías base. En dos años están casi rozándose con el primer equipo con un grupo de futbolistas que no tiene más de 23 años. Esta temporada ya han debutado dos jugadores con el primer equipo, Renato y Teddy, lo que se considera todo un éxito para una entidad tan joven como prometedora. Además, han sido muchos los jugadores del B que han entrenado a las órdenes de Alberto Monteagudo e incluso algunos juveniles y jugadores del cadete (Manuel o Diego, por ejemplo), los que han podido saborear lo que es un entrenamiento o una convocatoria con el primer equipo. «Nuestro objetivo sigue siendo el mismo estemos donde estemos», añade García. «Queremos ser un puente para el primer equipo. Si estamos en Tercera, pues mucho mejor. Pero no vamos a perder el norte, porque debemos trabajar siempre para el Segunda B y con jugadores jóvenes», subraya Isidoro.
Para la temporada próxima el contacto entre ambos equipos será incluso mucho mayor. Y es que los dirigentes han propuesto que Alberto Monteagudo dirija algunas sesiones del equipo entrenado por y Lillo -recién nombrado entrenador del equipo B- y que el propio Lillo pueda ayudar a Alberto Monteagudo en determinados momentos con su equipo. «Debemos compartir la misma filosofía de trabajo y debe haber flujo de ideas y proyectos en común en todo el club», añade Isidoro García, quien destaca de Lillo que es «un hombre de la casa, con carácter y características profesionales y personales muy interesantes. Empieza una etapa nueva esperanzadora».
La cantera, que surgía el año pasado tras un acuerdo con el Ciudad Jardín y con más de 30 equipos es ahora una de las entidades con mayor progresión. En estas dos últimas semanas los técnicos se han puesto manos a la obra para captar jóvenes talentos de Cartagena y su Comarca para sus equipos de base. Así, se han hecho pruebas para las categorías prebenjamín, benjamín, alevín, infantil, cadete, féminas y equipo B durante diez días y Juanmi García -responsable de todos ellos- y sus entrenadores han seguido muy de cerca a todos aquellos que se han acercado a probar. «Se los ha visto a todos y cada uno de manera pormenorizada. Algunos conseguirán tener una ubicación en este club. Tenemos amplitud para toda la gente que va a venir. Trabajamos para contar con los mejores, lo estudiamos todo. Es verdad que no tenemos en estos momentos a todos los mejores, porque la gente se tiene que identificar con el primer equipo», explica el exjugador de Primera, «que haya sentimiento de cartagenerismo. Y es que tantos años sin cantera hace que cueste convencerlo», señala el exportero.
No obstante, añade Juanmi que los padres y los propios jugadores se están dando cuenta de que «nos preocupamos por su crecimiento futbolístico y es muy importante que ellos mismos sean capaces de ver que están evolucionando. Ahí están los casos de Renato, Teddy o los juveniles y cadetes que entrenan con el primer equipo».
La cantera albinegra cuenta con 32 equipos, cerca de 450 chavales en sus bases y más de cuarenta entrenadores, un enorme conglomerado de equipos, categorías y partidos difícil de cuadrar durante la temporada. Los equipos están jugando sus encuentros en Ciudad Jardín, porque las bases mantienen el acuerdo de filialidad con este club. Es probable que este mismo año sea absorbido por el FC Cartagena y las bases pasen a denominarse como el propio club albinegro, aunque aún está por negociar.
Pruebas durante 10 días Los técnicos han seguido los pasos de los jóvenes desde prebenjamín
Durante las dos últimas semanas los técnicos de las bases han venido efectuando pruebas de captación para las categorías que van desde prebenjamín hasta el equipo B. Diez días de intenso trabajo con buenos resultados y optimismo para reforzar un club que no para de crecer. Los campos de fútbol de Ciudad Jardín e Ilusión Sport Center han sido el escenario donde se han desarrollado las pruebas. Todos los jugadores han podido demostrar su valía y la capacidad o no para poder pertenecer a las bases del conjunto albinegro. Ahora son los técnicos los que tienen la última palabra.
