El delantero navarro Mario Barco, máximo goleador del Pontevedra con 12 goles y quien no pudo estar en el choque de ida de la primera eliminatoria por el play off de ascenso a Segunda B en el que los granas se impusieron por 1-3 ya que sigue recuperándose de una complicada lesión de tobillo, no solo tiene claro que el solitario gol de Bonilla puede valer su peso en oro si consiguen marcar pronto el domingo en Nueva Condomina, ya que el pichichi del conjunto gallego está dispuesto incluso a arriesgar el próximo fin de semana si así lo estiman oportuno los servicios médicos del club para tratar de conseguir una hazaña muy complicada, pero no imposible.

«Creo que en ataque no fueron especialmente buenos, nos hemos enfrentado contra rivales mejores este año en la liga, lo que pasa es que después llegan y te marcan. Pienso que no tienen mejor equipo que la Ponferradina, lo que pasa es que ellos no las metían y el Murcia sí. El problema es que nos metieron tres y parece que nos han dado un baño, pero yo creo que no fue así», dijo un futbolista en declaraciones al Faro de Vigo en las que también puso de relieve la eficacia goleadora de un Murcia que desde la llegada de Víctor Curto y Sergi Guardiola lleva una media de más de dos goles a favor por partido.

Barco de hecho no ha tenido problemas en hacer público el sentimiento de un vestuario en el que, comparando ambos clubes, los gallegos tienen muy poco que perder y mucho que ganar en este partido. «A ver si van crecidos, se confían y nosotros les damos un susto para por lo menos poner emoción. Nosotros el optimismo lo vamos a tener siempre, no tenemos otra cosa mejor que hacer que disfrutar en un campo como ese. Quién sabe, lo mismo metemos gol en el minuto uno y ellos se asustan. Si ellos salen con una actitud relajada pensando que están ya clasificados, seguramente podamos darles un susto», insistió el atacante del Pontevedra.

«Yo este año me he quedado muy sorprendido y el sábado contra el Murcia la actitud de nuestros aficionados fue espectacular. El premio ya está conseguido y nos hemos dado cuenta de que ellos también lo saben. Le hemos trasmitido a toda la gente que este play off era un espectáculo más para disfrutarlo y aunque no nos ha acompañado el resultado, al final hemos podido darle esa emoción con el gol de Bonilla que nos ha hecho disfrutar más. Nos han hecho ver que se podía sacar un 2-3 que enganchase todavía más al equipo para la vuelta. Todos estamos muy conectados con la afición».

En el vestuario del Real Murcia nadie está dispuesto a que el Pontevedra se venga arriba en Nueva Condomina y los granas siguen preparando un partido como si se tratara del primer choque de la eliminatoria, tratando de olvidar la considerable ventaja del choque de ida para no asumir riesgos.

Los gallegos abrazan la historia

Si el Murcia fue muy superior en el encuentro de ida, ayer desde Galicia quisieron recordar que en el pasado más reciente sus visitas a la capital del Segura terminaron de manera muy distinta al pasado domingo en Pasarón. Fue en la temporada 2004-2005, con el equipo granate disputando sus partidos en la división de plata del fútbol español y el Real Murcia y el extinto Ciudad compartiendo estadio en esta categoría. Los granates ganaron primero al Ciudad de Quique Pina por dos goles a tres en un partido en el que marcaron por el lado granate Juan Navarro (2) y Javi Rodríguez y que sirvieron para contrarrestar el doblete de Dani Güiza.

En esa misma temporada, los granates volvieron a la vieja Condomina para medirse al que será su rival el domingo en el que es el último enfrentamiento entre granas y granates hasta dentro de tres días. Fue en la jornada 37, con el Pontevedra de Argibay exprimiendo sus últimas opciones de salvación y nuevamente salieron de allí con un resultado positivo. Charles y Capdevila hicieron dos dianas que permitieron sacar un empate ante el primer equipo de la ciudad (2-2).