El alemán Sebastian Vettel (Ferrari) logró este domingo su segunda victoria de la presente temporada en el Mundial de Fórmula 1, del que ahora es líder en solitario, al ganar el Gran Premio de Baréin, por delante de los dos pilotos de Mercedes, el británico Lewis Hamilton y el finlandés Valtteri Bottas.

Vettel lidera el Mundial de pilotos con 68 puntos, siete más que Hamilton, con el que estaba empatado a 43 antes de empezar la tercera carrera de la temporada. Bottas se coloca tercero con 38.

Los españoles Fernando Alonso (McLaren-Honda) y Fernando AlonsoCarlos Sainz. El primero por una nueva avería en el motor, esta vez a una vuelta y media del final, aunque en la clasificación figura con el decimocuarto puesto. El segundo, por un choque con el canadiense Lance Stroll (Williams) en el decimotercer de los 57 giros.

Sebastian Vettel, cuatro veces campeón mundial, acumula 44 victorias en Fórmula Uno y ya dos en la presente temporada, tras la lograda en la prueba inaugural, en Australia.

Además, se trata del tercer triunfo del germano en Baréin, en el que también ganó en 2012 y 2013, con lo que empata en número de victorias en este gran premio con Fernando Alonso, vencedor en 2005 y 2006, con Renault, y en 2010, con Ferrari.

Por detrás de los tres primeros y dentro de los puntos acabaron el finlandés Kimi Raikkonen (Ferrari), el australiano Daniel Ricciardo (Red Bull), el brasileño Felipe Massa (Williams), el mexicano Sergio Pérez (Force India), el francés Romain Grosjean (Haas), el alemán Nico Hülkenberg (Renault) y el también francés Esteban Ocon (Force India).

En la arrancada Bottas, autor de la 'pole', mantuvo la primera plaza, mientras Vettel dio cuenta de Hamilton en la primera curva. El finlandés pudo mantener por detrás a Vettel en los primeros giros y con el inglés ya un poco descolgado.

En una estrategia agresiva de Ferrari, Sebastian Vettel hizo su primera parada para cambiar neumáticos en la undécima vuelta, lo que le permitió asumir poco después el liderato.

La salida del coche de seguridad tras el incidente entre Stroll y Sainz, precipitó un adelanto en los planes de Mercedes, que hizo entrar en boxes a sus dos pilotos. Hamilton ralentizó su velocidad al acceder a la calle de garajes para detener el ritmo del australiano Daniel Ricciardo (Red Bull), lo que le costó una sanción de cinco segundos que tuvo que cumplir en su segunda parada.

Pese a que Bottas llegó a cederle la segunda posición, el destino de Hamilton en la carrera ya estaba escrito, ya que Vettel había abierto un margen suficiente.

Lewis Hamilton, tres veces campeón, lanzó un último ataque en las últimas vueltas para tratar de dar alcance a Sebastian Vettel, pero ya era muy tarde. pese a que el germano tuvo que negociar con muchos doblados.

Fernando Alonso tampoco pudo completar la tercera carrera del año, tras haber abandonado tanto en Australia como en China.

El motor Honda de su McLaren aguantó 56 de las 57 vueltas cuando el bicampeón español ocupaba la decimotercera plaza y llegó a marchar en la undécima plaza. En la clasificación final figura en el decimocuarto y último puesto.

Alonso, que estrenaba motor tras romperse el que usó en la sesión de clasificación del sábado, se lamentó durante la carrera de la alarmante falta de potencia. "Nunca en mi vida he corrido con menos potencia", dijo por radio mediada una prueba en la que protagonizó espectaculares pero estériles adelantamientos.

Su compañero de equipo, el belga Stoffel Vandoorne, ni siquiera pudo tomar la salida. El motor de su McLaren le impidió instalarse en la parrilla y tuvo que ver el gran premio desde el garaje.

La carrera de Carlos Sainz duró trece vueltas. Un choque con el Williams de Lance Stroll cuando trataba de adelantar por el interior en la primera curva al canadiense mantuvo su maldición con el trazado de Sakhir, en el que ya acumula tres abandonos en otras tantas visitas.

El holandés Max Verstappen (Red Bull) abandonó la carrera una vuelta antes que Sainz, en su caso al irse largo en una curva por un fallo en los frenos de su monoplaza