En cuestión de tres minutos, entre el 60 y el 63, el Real Murcia sentenció el encuentro frente al Córdoba B. Un penalti a favor y un error garrafal del guardameta rival, sirvieron para que el equipo entrenado por Vicente Mir obtuviera la tercera victoria seguida. Con este resultado, el cuarto puesto que marca la zona de ascenso está a un solo punto para los murcianistas.

El Córdoba B entró al partido sin ningún miedo y, en un par de opciones, hicieron temblar La Nueva Condomina. A los seis minutos, Quiles se resbaló cuando estaba solo para empujarla a la red tras un pase de Moha. El central Pablo condujo un contragolpe y se coló hasta el área murcianista, pero disparó muy forzado. Poco a poco, este inicio frenético dio paso a un mayor dominio grana.

Guardiola y Curto se movían con agilidad en la vanguardia y obligaron al portero Valera a intervenir varias veces. En los últimos minutos de la primera parte, Curto intentó una chilena espectacular desde el punto de penalti, pero el guardameta cordobesista respondió con una excelente estirada.

Tras el intermedio, el Real Murcia dio un paso adelante. Guardiola se estiró para rematar con la derecha un centro de Isi, pero el portero sacó una mano providencial. Acto seguido, Rayco lanzó al palo un esférico que tocó ligeramente en un rival.

En un abrir y cerrar de ojos el Real Murcia encarriló el encuentro. En el minuto 60, Guardiola alcanzó un balón dentro del área, el portero Valera llegó un segundo más tarde y le derribó. Desde los once metros, el propio Guardiola transformó el penalti con un tiro pegado al palo que hizo inútil la estirada del guardameta.

Antes de que el conjunto andaluz se diera cuenta, ya había encajado el segundo. Valera, en lugar de despejar, regaló el balón a Curto, que apenas tuvo que empujarla. En los últimos veinte minutos no sucedió prácticamente nada. El Córdoba B no fue capaz de reponerse de los goles encajados, mientras el Real Murcia replegó líneas a la espera del pitido final.