"Quiero pedir perdón a Álex Quintanilla, al Mirandés y al UCAM porque me he equivocado y mi gesto no fue nada bonito", ha dicho esta mañana en rueda de prensa Biel Ribas sobre la acción antideportiva que protagonizó el pasado sábado en el encuentro y que ha levantado un gran revuelo. El guardameta mallorquín ha añadido que "quiero aclarar que son lances del partido, no tengo excusa, pero se produce en una situación del juego en la que estoy desbordado, porque el jugador del Mirandés tiene la pelota y yo estoy fuera de la portería, pero con eso no quiero excusarme. Soy un jugador muy impulsivo, tenía el grado de tensión muy elevado porque nos estábamos jugando mucho y me sale hacer eso. Es una bobería, una tontería que no tenía que haber hecho y una vez más pido perdón al jugador, al presidente del Mirandés y a mi club", ha comentado.

Posteriormente, el futbolista ha manifestado que "he leído que le pego un puñetazo, pero en las imágenes se ve que no es un puñetazo. Un puñetazo tiene más maldad que un manotazo", ha dicho, para matizar que "sí que es un gesto feo. Es un córner, salgo a despejar y el rechace cae al jugador del Mirandés que está al borde del área. Veo que a lo mejor puede chutar y el otro me está agarrando. En ningún momento le quiero hacer daño porque me estoy jugando el penalti", ha dicho, para aclarar que "es un chico que no me había hecho nada durante el partido, no me había calentado durante, fue un manotazo en la cara para quitármelo de encima y no para agredirle".