El Real Murcia se ha llevado un punto del Álvarez Claro en su duelo ante el Melilla (0-0. Después de una primera mitad en la que ninguno de los dos equipos logró imponerse, el Murcia arrancó mejor la segunda parte gozando de varias ocasiones. Aunque, cuando parecía que mejor estaba, llegó la expulsión del meta Diego Rivas con la que prácticamente finalizó el choque.

En la primera parte ninguno de los dos equipos logró crear ocasiones claras de gol. Si acaso el Melilla con un cabezazo de Santi Luque tras

una internada de Pepe Romero por banda derecha poco antes del descanso. El Murcia, por su parte, estuvo muy impreciso con el balón

en sus pies siendo incapaz de elaborar juego y optando por jugar en largo en la mayoría de ocasiones.

En cambio, en la segunda mitad, los granas consiguieron despertar. Sergi Guardiola tuvo la mejor ocasión con un cabezazo a bocajarro sobre la línea de gol tras un pase de Rayco y el propio delantero creó más peligro que terminó despejando tanto la zaga local como el portero Dani Barrio. Sin embargo, cuando mejor pintaban las cosas para los granas, un error en la salida de Diego Rivas al golpear a Cubillas provocó la expulsión del meta del Murcia. El equipo murciano disputó los últimos veinte minutos en inferioridad numérica y consiguió aguantar las llegadas del Melilla.