Cristo Martín es la excepción que confirma que el ataque del FC Cartagena se sostiene por jugadores como él. Se ha convertido el tinerfeño en el mirlo blanco de la delantera, porque es el único futbolista que pese a la marejada que se vive en esta parcela en el conjunto albinegro, es capaz de sobrevivir y mantenerse intacto a todo tipo de circunstancias adversas que haya padecido el bloque esta temporada.

Martín ha disputado los 22 encuentros de liga, más el enfrentamiento de Copa del Rey frente al Hércules y siempre lo ha hecho como titular. Monteagudo tiene en el centrocampista una confianza enorme y el jugador se la ha devuelto con siete tantos, que le convierten, junto a Juanlu Hens, en el máximo goleador del plantel cartagenerista.

Mientras el atacante ha solventado con éxito este tramo de competición, no pueden decir lo mismo el resto de sus compañeros. Alberto Monteagudo ha probado con hasta tres delanteros diferentes -Arturo, Chus Hevia y Fernando-, lo mismo que en la media punta -Sergio García, Juanlu Hens y Chus Hevia-. Como interior Cristo Martín parece imperturbable, aunque es un futbolista que goza de total libertad para moverse en la zona de peligro sin estar constreñido a la banda derecha. Sin embargo, en el otro carril, el izquierdo, Óscar Rico no ha tenido la continuidad de su compañero y tuvo que intercalar su posición con Sergio García al menos en cuatro jornadas esta temporada.

Martín, además, tan sólo ha sido sustituido en dos ocasiones esta campaña, frente al Ejido y contra el Jumilla. Con sus tantos, siete como hemos indicado anteriormente, ha contribuido a que el FC Cartagena sume trece puntos, pero además ha salvado puntos ante el Linense, Recreativo y Linares -dos empates y una victoria-. El tinerfeño se encuentra a sus 29 años ante una de sus mejores temporadas en Segunda División B, confirmándose como uno de los pilares básicos que sostienen al equipo albinegro en labores creativas.

La llegada de nuevos futbolistas netamente ofensivos como Isi Ros, Artiles y el delantero que debe llegar antes de que finalice el mes de enero, suponen modificar en parte el modelo del entrenador, con futbolistas más rápidos, habilidosos y técnicos que podrían dotar al bloque albinegro de movilidad, triangulación y velocidad, características que se han visto mermadas por el perfil de aquellos que causaron baja.

Un modelo diferente

Tanto Martín como el propio Juanlu Hens volverán a tener un papel decisivo en ese modelo. La salida de Fernando y Hevia suponen que el juego albinegro deba de ser más dinámico, menos constreñido e incluso más vistoso para el espectador.

El entrenador intenta que el fútbol conservador de los últimos encuentros en casa sea desterrado definitivamente y el Cartagena consiga que su campo sea uno de los argumentos principales para que el conjunto albinegro consiga mantenerse en cabeza durante mucho tiempo.