El UCAM CB Murcia empieza a jugar con fuego. El conjunto universitario sufrió ayer ante el Baskonia otra derrota de las que son muy difíciles de digerir. Cierto es que darle un susto a un equipo de la envergadura como el que dirige Sito Alonso siempre es complicado. Pero es que el UCAM se escondió detrás de la cortina y se le olvidó salir. Ni lo intentó. El equipo murciano no tuvo ninguna opción de pelear por la victoria y la afición del Palacio asimiló prácticamente desde el inicio otro duro golpe. Los seguidores mostraron de nuevo su malestar por la dinámica en la que se encuentra el club, tanto al descanso como al final del encuentro, y señalaron a Óscar Quintana, entrenador universitario, como principal responsable.

El UCAM no logró imponerse ni en el saque inicial, donde el recién llegado Kevin Tumba perdió el salto ante el exmurcianista Kim Tillie. El pívot congoleño, con solo un entrenamiento en Murcia, no desentonó en su estreno. En defensa fue capaz de frenar en varias ocasiones a las torres del Baskonia y terminó cazando tres rebotes, aunque en ataque se le vio algo más endeble pese a que en todo momento buscó ayudar en el bloqueo a sus nuevos compañeros.

Pero ellos siguieron empeñados en poder pelear por la victoria desde la vía rápida. El 0/15 en triples que destacó en las estadísticas durante el segundo cuarto, hasta que Llompart cortó la mala racha con un lanzamiento desde casi los ocho metros, hizo mucho daño. Tan solo Radovic, que se retiró entre aplausos tras sus 18 puntos y 7 rebotes, intentó conseguir algo por dentro y combatió contra Tillie y Bargnani en la pintura.

No obstante, la distancia en el marcador pudo ser más sangrante si no llega a ser por los 19 puntos de Benite en el último cuarto -de los 27 con los que acabó el duelo- . El acierto del escolta brasileño ayudó a maquillar el luminoso en los últimos instantes y le sirvió para llegar a su máxima anotación en la ACB hasta la fecha.

La baja de Martynas Pocius, con una rotura parcial del tendón rotuliano de su rodilla que no se descarta que le haga pasar por el quirófano en unas semanas, también pasó factura en la rotación de la posición de tres al no poder contar tampoco con Ovie Soko. Sadiel Rojas finalizó el partido dolorido tras recibir un golpe por parte de un rival y Baron y Benite, junto a Campazzo y Llompart, se repartieron los minutos mientras el dominicano estaba en el banquillo.

Y eso que el UCAM reaccionó de buena forma al parcial de 0-5 con el que el Baskonia arrancó ayer en la pista del Palacio. La conexión entre Billy Baron y Nemanja Radovic permitió igualar el marcador (5-5) y provocó un intercambio de roles. Mientras que el norteamericano supo leer el partido durante esos momentos con el balón en sus manos, Facundo Campazzo veía una y otra vez como el aro escupía sus cinco triples que intentó en los primeros diez minutos.

Al base argentino se le vio muy ofuscado con el lanzamiento de tres y los tiros exteriores de Tillie y Barganni terminaron por descentrar a los universitarios (7-10). Kevin Tumba, un poco perdido en ataque en su debut, anotó sus primeros puntos como jugador del UCAM desde el tiro libre y, desde la misma línea, el Baskonia incrementó su ventaja antes de llegar al término del primer cuarto (10-18).

Los fallos desde el triple se prolongaron en el segundo capítulo del choque y los universitarios llegaron al descanso con tan solo un lanzamiento convertido, de la mano de Llompart, de los 17 que intentó en los primeros veinte minutos. El base Shane Larkin se empezó a convertir en la peor pesadilla de los locales (16-26) y los universitarios terminaron por perder los nervios tras un saque de fondo en el que el Baskonia se encontró con una posesión regalada. Además, una antideportiva de Facundo Campazzo sobre Diop acabó con una técnica para Quintana y, a partir de ahí, el UCAM desconectó del partido y los de Sito Alonso, sin ser demasiados superiores, encontraron facilidades para marcharse a los vestuarios con veinte puntos de ventaja (23-43).

En el arranque de la segunda parte tampoco cambiaron las cosas para el UCAM. El conjunto universitario continuó con su racha nefasta en el tiro exterior y el Baskonia siguió sumando puntos para resarcirse de su última derrota en Euroliga por treinta puntos (30-49). Radovic y Benite se convirtieron en las mejores armas del UCAM para, al menos, salvar los muebles de la forma más digna posible, sin embargo, Andrea Bargnani hizo mucho daño desde todas las distancias posibles, mientras que Sadiel Rojas se tuvo que retirar al banquillo durante varios minutos al recibir un duro golpe de un rival en el estómago, y los universitarios encararon los últimos diez minutos con una distancia insalvable (42-66).

Radovic y Benite se echaron el equipo a las espaldas y gracias a su acierto en el último cuarto, el UCAM consiguió que la derrota no fuera más dura por números, ya que por sensaciones la distancia entre un equipo y otro fue demasiada grande. El interior montenegrino se retiró devolviendo al público sus aplausos y el escolta brasileño marcó sus mejores números en la Liga Endesa que, por momentos, llegaron a rebajar la distancia sobre los diez puntos hasta que el Baskonia pisó de nuevo el acelerador y se encontró con demasiadas facilidades para anotar. No obstante, el mal ya estaba hecho y la grada del Palacio ya había dictado sentencia sin tener en cuenta el resultado con el que finalmente despidió a los suyos en otro domingo fatídico (71-92).