Entre el FC Cartagena -primer clasificado- y el San Fernando -noveno- la distancia es de once puntos. Con toda una segunda vuelta por disputarse, ninguno de los de arriba -Cartagena, Lorca, Villanovense, Jumilla, Melilla, Real Murcia, Mérida y San Fernando- quiere perder el tren y buscan y rebuscan en el trillado mercado de jugadores de las competiciones españolas, y alguna que otra extranjera, para reforzar sus respectivos bloques, dar un salto cualitativo y posicionarse entre los cuatro primeros.

El Cartagena, líder de la categoría, es el que menos ruido viene haciendo para incrementar su plantel. Si bien es cierto que es el líder, los dirigentes movían la pasada semana ficha para contratar a un nuevo sub-23 que llega tras la baja de Quintana.

Isi Ros, que ya debutó el domingo en Linares, es la única incorporación hasta el momento. Las pretensiones del bloque albinegro son altas, más aún después de que se les haya marchado un peso pesado del equipo, como es el caso de Fernando. Movido por un futuro incierto en la segunda vuelta, el atacante sevillano fue empujado a la búsqueda de destino. Se va a Filipinas, donde buscará una buena compensación económica por emigrar. Así pues, está claro que un delantero es el objetivo prioritario para los albinegros y así lo manifiestan entrenador y propietarios. Entre ceja y ceja tienen a Thierry Florian, un delantero excartagenerista, embarcado ahora en la liga belga y donde ya le están haciendo las maletas. Aunque tiene contrato hasta junio, el francés busca destino y el Cartagena quiere aprovecharse con un jugador de clase y con mucho tirón. El gran problema es el alto caché que tiene Florian y que en estos momentos sería inasumible para las arcas de la entidad albinegra.

Hipotecar parte del presupuesto por un jugador que apenas está teniendo minutos en su equipo es un riesgo que no parece que vaya a tomar el propietario de la entidad Paco Belmonte.

Subir a toda costa

Pero si en Cartagena se cuenta cada euro a invertir, no ocurre lo mismo cuando se trata del segundo y del tercer clasificado. El Lorca ha fichado al defensa internacional chileno Rojas, lo que supone el primer bombazo del mercado invernal. Además, el propietario del equipo lorquino no se quiere quedar ahí y no va a reparar para contratar jugadores de superior categoría si se ponen a tiro. Dice que quiere futbolistas de Segunda. Hasta cuatro jugadores más podrían llegar en los próximos días con un poco de suerte: un lateral zurdo, un medio centro y dos extremos son las pretensiones de Gembao y Algar. Los dirigentes quieren subir este año y lo más rápido es acabar campeones de grupo.

El Marbella se fue desinflando conforme transcurrieron las jornadas y ahora ha caído a la tercera posición, tras liderar el grupo durante la mayor parte de la primera vuelta. De momento ha contratado a un central, un interior zurdo y un delantero y parece que no tiene intención el propietario del club malagueño, el ruso Alexander Grinberg, de quedarse aquí y no descarta un jugador de medio campo y otro atacante más. Despotovic, Chacopino, Graxa y Serrano ya son historia en la entidad marbellí.

Después de los dos 'Fórmula Uno' del grupo, en cuanto a presupuesto se refiere, el Villanovense ha manifestado que debe fortalecerse con un jugador en defensa y un centrocampista organizador. Los extremeños se han colado de rondón como cuartos y no están dispuestos a salir de ahí, por lo que el preparador Manolo Sanlúcar ha manifestado que es básico retocar algunas parcelas de la entidad, pero sin volverse locos, pues mantienen uno de los presupuestos más humildes del grupo cuarto. Espín y Elías han causado baja en la entidad.

Los dueños del Jumilla, que camina en quinto lugar con 35 puntos -a uno del Villanovense-, son discretos en sus movimientos, pero también están llegando tarde a algunas operaciones, quizá por falta de experiencia. El bloque de Pichi Lucas es la gran sorpresa de la temporada y no pretende que sea flor de un día, por lo que acelera sus pasos para encontrar al delantero que incremente esa escasa capacidad anotadora de los vinícolas. Junto al atacante, el club quiere incorporar a dos centrocampistas más. Entre los que suenan, Rubén Cuesta, un centrocampista cordobés de 35 años, que juega en la Primera División boliviana y quien ya piensa en el regreso a su tierra.

El Melilla, sexto con 32 puntos, tiene su lista de descartes para cuando lleguen -si es que lo hacen- los refuerzos este enero. En la misma suenan David Vázquez y Cascón, además de Yuri, con el que ya ha hablado el club. La entidad norteafricana pretende incorporar un jugador de banda y otro arriba -delantero o mediapunta-.

El Real Murcia, a contrarreloj

El Real Murcia anda moviendo fichas de un lado para otro, porque tras una primera vuelta irregular, conserva las opciones intactas de meterse en el grupo de cabeza. De ahí que hayan muchas operaciones en marcha. De momento ya tiene contratado a David Sánchez, un organizador de 34 años muy experimentado en la categoría y que llega procedente del Baleares. Además, el club tiene avanzada la negociación de un central sub-23, Josema, procedente del Almería.

De esta manera, la entidad se desprenderá de un defensa -todo apunta a Sobregrau-, que ante la falta de minutos podría hacer las maletas en breve. Por otro lado, Deseado Flores, director deportivo grana, quiere reforzar el ataque con Víctor Curto, del Linares, pero la operación parece haberse estancado por las altas pretensiones económicas del club jienense para dejarlo marchar. El extremo Kike Márquez, del Marbella, está también en la agenda murcianista, aunque la operación de salida del futbolista anda enrocada.

En cuanto al Mérida, el equipo que ha conseguido desperezarse tras la llegada de Eloy Jiménez, se encuentra en una tesitura similar a la de la mayoría de equipos: la caza de un delantero ya que Hugo Díaz, con cuatro tantos en lo que va de año, no está fino hasta ahora, lo mismo que les ocurre a José Ramón y Qasmi, con dos tantos cada uno. Con un octavo puesto y 31 puntos debe echar toda la carne en el asador en una segunda vuelta que se vislumbra complicada.

El San Fernando, con 30 puntos, ha sido de los más madrugadores en el capítulo de contrataciones. El equipo gaditano no ha tardado mucho en moverse, de ahí que haya incorporado a Zelu, un delantero procedente del Málaga B y que llega cedido; Rubén García, un defensa que procede del Elche Ilicitano y Javi Medina, delantero que llega del Alcobendas.

A falta de 20 días para que esta vorágine de transacciones finalice, lo que sí está claro es que unos por aspiraciones y otros por el temor a que los demás se refuercen mejor, no van a dejar de hacer cambios en sus planteles. Solo a cuatro les puede salir mejor que al resto, pero nadie quiere quedarse en fuera de juego.