Hace exactamente siete días que Ovie Soko saltaba de inicio al Martín Carpena para disputar el último partido de la primera fase de la Eurocup ante el Unicaja. El alero del UCAM CB Murcia reapareció dejando muy buenas sensaciones y confirmando que estaba listo para ayudar al equipo universitario a cambiar su dinámica en la Liga Endesa después de cuatro semanas apartado de las pistas por un esguince de tobillo. Sin embargo, el británico se resintió de ese mismo pie el pasado martes durante un entrenamiento y será duda para recibir el sábado, a las 18.30 horas (Movistar +), al Bilbao Basket en el Palacio.

La mala suerte con las lesiones se está cebando con el equipo que dirige Óscar Quintana, ya que acumula prácticamente un mes arrastrando problemas físicos en la posición de tres. A la duda para el sábado de Soko, hay que añadir a un Sadiel Rojas que volverá a saltar la cancha con máscara, como ya hizo en la derrota del domingo en Tenerife. El dominicano sufrió un golpe en el encuentro ante el Unicaja que le provocó una doble fractura de los huesos propios de la nariz y, a pesar de que el cuerpo técnico y los servicios médicos le aconsejaron parar, disputó el choque ante el Iberostar Tenerife siendo uno de los jugadores más destacados del equipo. «No me hace falta la nariz para jugar al baloncesto», afirmó hace unos días preguntado por su decisión de no perderse el partido.

Y es que, si finalmente Ovie Soko no llegase a tiempo para la cita ante el conjunto vasco, Rojas y Pocius serán los dos únicos aleros con los que podrá contar Quintana para un partido que podría suponer un punto de inflexión en la temporada. El lituano, que también ha contado con molestias en una de sus rodillas durante este curso, no termina de ser el jugador determinante que se esperaba este verano con su contratación y desde el club esperan que sea capaz de conseguirlo lo antes posible, puesto que su aportación puede ser clave para marcar las diferencias y revertir la situación por la que atraviesa el UCAM en la ACB. Una derrota el sábado podría dejar a los murcianos muy descolgados de la parte media de la tabla, por lo que los propios jugadores son conscientes de la importancia que supone la cita ante el Bilbao Basket.

En esta línea se pronunció ayer Vítor Faverani, quien asegura que todas las partes tienen que remar «en la misma dirección» para darle portazo a esta mala racha. «Presidente, directivos, jugadores, cuerpo técnico, aficionados€ todos somos uno y el día del partido todos queremos lo mismo. Necesitamos ganar partidos y si no remamos todos, no llegaremos a ningún sitio», afirmó el pívot del UCAM e incidió de la importancia de que «si no estamos unidos no vamos a salir de esto».

Faverani afirmó que el equipo tiene que mejorar en tareas defensivas y no cometer los fallos del pasado domingo en Tenerife, donde se encajaron demasiados puntos. «Tenemos que defender mejor porque el equipo tiene un nivel físico y defensivo alto, y no lo estamos demostrando. Cuando estamos bien desde atrás, cuando impedimos que los rivales anoten, el juego se hace mucho más fácil en ataque», explicó el interior. «Solo pensamos en el próximo partido ante el Bilbao Basket. Desde pequeño aprendí que una vez que saltas a la pista olvidas todos los problemas y entras a competir. Cuando sales, te coges la mochila de los problemas y te la vuelves a llevar. Mientras se está en la pista no hay que pensar en otra cosa que no sea en jugar y ganar», concluyó.