El UCAM Murcia afrontará otra complicada semana con dos partidos ante dos rivales de entidad. Primero visitará la pista del Zenit de San Petersburgo el miércoles (19.00 horas, La 7 TV) y después recibirá el sábado en el Palacio al Gran Canaria (18.30 horas), que ayer arrolló al Montakit Fuenlabrada en su compromiso de liga, ganando por 51 puntos de diferencia (111-60).

Tras tres derrotas consecutivas (Real Madrid, Bayern Munich y Zaragoza), el equipo murciano terminará este miércoles su ´gira´ de 14 días fuera de la capital del Segura en tierras rusas, en su tercer partido de Eurocup. Y para finalizar la semana llegará al Palacio un Herbalife Gran Canaria, que ayer logró su primer triunfo de la temporada en liga, a pesar de que hace poco más de un mes se proclamó campeón de la Supercopa de España para sorpresa de todos.

Curiosamente, el UCAM Murcia está teniendo graves problemas en defensa en este inicio de temporada. En las tres últimas derrotas ha encajado más de 90 puntos fuera casa durante los últimos siete días, algo que no ocurrió la pasada campaña con el griego Fotis Katsikaris al frente.

El UCAM no perdía tres encuentros seguidos desde el comienzo de la Liga 2015/2016 -Unicaja, Zaragoza y Barcelona. Ahora tiene que mejorar su defensa para ser competitivo y el pasado sábado quedó demostrado al encajar 95 tantos por parte de un equipo que venía promediando 75,2.

Esa derrota se encadena a las sufridas por el cuadro dirigido por Óscar Quintana en las canchas del Real Madrid por 93-86 el pasado domingo y del Bayern de Munich alemán en la Eurocopa por 92-84.

Antes, en la segunda jornada del campeonato, los granas habían caído también en la pista del Baskonia por 87-75. Se da la circunstancia de que en sus tres últimos tropiezos la constante ha sido la mala defensa, encajando nada menos que 280 puntos.

La pasada temporada, en la que el UCAM CB firmó la mejor clasificación de su historia, al ser séptimo, el conjunto entonces dirigido por Katsikaris encajó más de 90 puntos seis veces y en cuatro de ellas el rival fue el mismo, el Real Madrid.

Al término del choque en Zaragoza, Quintana interpretó desde la defensa lo ocurrido en el pabellón Príncipe Felipe.

«Podemos hablar poco de baloncesto. Hubo un equipo con más deseo, intensidad y coraje de principio a fin y que creyó en su trabajo y dominó el partido siendo superior en todos los aspectos del juego», explicó.