Bendito problema, pensarán algunos, el que concierne al técnico del UCAM Murcia, José María Salmerón. El primer mes de competición se ha deshecho ante nuestros ojos como la ceniza de un cigarrillo, pero con algo más de detenimiento y unos cuantos minutos sobre el césped hemos podido comprobar de buena mano las prestaciones de un plantel totalmente renovado. Tras diecisiete incorporaciones, Salmerón ha podido dilucidar cuales de esos futbolistas podrán ser más o menos esenciales en su esquema inicial.

Yendo por partes, de lo que no cabe duda es de que Biel Ribas es el dueño indiscutible de la portería universitaria. Desde que llegase allá por enero, los ocho meses posteriores han topado con su presencia ininterrumpida bajo palos. Si bien es cierto que esta temporada ha descansado en la primera ronda de Copa, se dilucida de esta forma la superioridad sobre el resto de sus competidores en la batalla por reinar bajo el arco del UCAM.

Fernando, convocado como suplente de Biel Ribas en Liga y titular únicamente en Copa, y Escalona, que solo ha estado entre los seleccionados en dicha eliminatoria copera como suplente del propio Fernando, no alcanzan el nivel de un portero que está siendo clave en la buena racha inicial del UCAM y que ya ha alcanzado el top 3 de paradas de la jornada en dos ocasiones tras siete jornadas de Liga.

La defensa no entraña demasiados quebraderos de cabeza para el técnico, algo que entraña la escasez de efectivos en esa parcela (seis jugadores puros). Solo la lesión de Fran Pérez y la acumulación de partidos en este arranque de competición han generado las diversas rotaciones vistas hasta la fecha: el carril derecho ha sido para Tekio (Kitoko ocupó ante el Elche esa demarcación); el zurdo es propiedad del capitán, Góngora; y la pareja de centrales compuesta por Albizua (que ha jugado todos los minutos disputados) y el propio Fran Pérez hasta su lesión. No obstante, al central santanderino aún le restan un par de jornadas más en el dique seco y su puesto, que ha ocupado hasta la fecha Hugo Álvarez con solvencia, parece tener un buen recambio. Además, el UCAM cuenta con el comodín zurdo, el aguileño Morillas, que ha demostrado rendir tanto en el lateral como en el flanco izquierdo del eje de la zaga.

El equilibrio del esquema universitario se ha solventado hasta la fecha sobre un trivote que cuenta con cinco alternativas distintas y que, por el momento, se ha dividido los minutos religiosamente. De más a menos tiempo repartido, Kitoko, Juande, Tito, Basha y César Remón entrañan la máxima competencia que cualquier técnico desearía, una rivalidad por conseguir un puesto en el que hasta la fecha, Juande se está erigiendo como el baluarte esencial del equipo. Desde que se ultimase su llegada al UCAM ya con las dos primeras jornadas de Liga expiradas, Juande ha disfrutado casi del 80% de los minutos posibles constituyéndose como una institución en el centro del campo universitario. Líder en pases de toda la plantilla, incluso ha podido marcar un tanto con el UCAM en Copa del Rey.

Por último, si en el centro del campo casi se disponen de dos jugadores por puesto, hasta nueve son los que pelean cada semana por tener cabida en la ofensiva del UCAM. Un tridente que ha conocido en un mes infinitas variantes y que, por ahora, no tiene dueño en ninguna de las demarcaciones. Eso sí, a partir de las primeras jornadas, se extraen las conclusiones iniciales: Natalio, el hombre más utilizado con 410 minutos por su faceta de comodín como delantero centro o partiendo desde la banda, se erige hasta el momento como el baluarte ofensivo, aunque únicamente haya sido capaz de cosechar un tanto con la elástica azul dorada; también Jesús Imaz, autor de dos goles hasta la fecha, es uno de los más importantes en el once.

Pero a partir de ahí, la enumeración de nombres y el reparto de minutos entre hombres como Jona, Juanma Delgado, Guichón, Pere Milla, Collantes, Nono y un Vicente que ve subir su importancia como la espuma con el paso de las semanas, se convierten en una tarea ardua y un quebradero de cabeza para el propio Salmerón. Y todo esto sin contar que tanto Pallarés como Isi Ros, dos jugadores clave el pasado curso, no han contado hasta la fecha para Salmerón.