Fran Hernández se acaba de proclamar Campeón de España de Tiro Olímpico en la modalidad de pistola libre a 50 metros. En Granada, este tirador cartagenero consiguió el premio por el que llevaba luchando durante años.

Comenzó a practicar esta disciplina cuando era niño influenciado por su padre, que fue tirador y ahora es árbitro. «Gracias a él comencé a practicar tiro, me vieron cualidades y confiaron mucho en mí», relata. En su etapa como junior, formó parte de una gran generación que fue ganó el Campeonato de Europa Junior por Equipos en Dinamarca. Desde entonces, su progresión ha sido imparable.

Después de ser varias veces campeón regional, y de asomarse al podio en competiciones nacionales, al fin, a los 23 años, ha alcanzado el éxito. Reconoce que llegó con confianza al Campeonato de España, y que se veía con posibilidades de ganar el título. Además, lo hizo con suficiente holgura respecto al vallisoletano Pablo García, al que venció por tres puntos de ventaja, aunque destaca que «no fue nada fácil». Comenzó la final un poco titubeante, pero luego se rehizo y realizó una buena serie de tiro, que le permitió llegar al último disparo concentrado y con la confianza suficiente para ser el ganador.

Actualmente, estudia en la Facultad de Ciencias del Deporte (INEF) en Madrid, al tiempo que entrena en el Centro de Alto Rendimiento becado por la Federación de Tiro. «No es un camino de rosas», reconoce, «porque es fácil descuidar el tiro en época de exámenes, y descuidar los estudios en época de competición».

A partir de ahora, puede mirar al futuro con optimismo: «Desde este campeonato todo es más fácil, porque te das cuenta de que el trabajo bien hecho, da buenos resultados», declara.

A solo un mes de los Juegos de Río, desea lo mejor para los tiradores españoles que acudirán, como Sonia Franquet o Pablo Carrera. Él no pudo clasificarse para la cita de este verano en Brasil, pero ahora su objetivo será estar en Tokio 2020. «Me veo con posibilidades de cara al próximo ciclo olímpico, de llegar a los próximos Juegos». Aún es joven, solo tiene 23 años. Por tanto, seguirá trabajando para hacer realidad su sueño de estar en unas Olimpiadas.