Ni los cánticos al finalizar el partido de una afición volcada, acompañados de una gran ovación, pudieron consolar a los jugadores del Águilas, que se entregaron durante los noventa minutos en el partido de vuelta de la final por el ascenso a Segunda B ante el San Fernando. Los locales tuvieron cerca el ascenso, lo rozaron cuando a falta de 17 minutos para la conclusión, marcaba Emilio, pero 120 segundos más tarde, en el único error defensivo de los costeros y en la única ocasión de gol de los visitantes, terminaba el sueño del ascenso, un golpe al que no supo sobreponerse el equipo costero.

El partido comenzó 22 minutos tarde. La llegada de más de 500 aficionados de San Fernando provocó que se tuvieran que adoptar medidas de seguridad para separar a las dos aficiones. La tarde era de fiesta, el centenario campo de fútbol de El Rubial presentaba un aspecto como el de las grandes citas, con más de 4000 personas en las gradas, y una charanga que acompañaba los cánticos de la grada. Era todo perfecto, pero el sueño se rompió dos minutos después de ponerse de cara. A pesar de no lograr el ascenso, la afición blanquiazul reconoció a los suyos la gran temporada que han realizado.

Los aguileños tardaron diez minutos en bajar el esférico al suelo y comenzar a aproximarse al área visitante. Al cuarto de hora, José Manuel centraba y el balón se paseaba por la línea de gol sin encontrar rematador. A los costero les costaba, pero dominaban el partido y jugaban mejor que el rival. Fue en el último cuarto de hora cuando se sucedieron las ocasiones para los costeros, sobre todo de Juanmi, quien en tres lanzamientos desde la frontal pudo abrir el marcador. Piñero también disfrutó de una gran ocasión, pero el esférico lo enviaba el portero Zamora a córner.

El segundo periodo fue más abierto, pero sin apenas ocasiones de gol. Los visitantes buscaron las bandas para llegar al área de Javi Soto, pero sin éxito, mientras que los aguileños, controlaban el esférico pero no creaban tantas ocasiones como en el primer acto. El tándem Guirado-Meca arriesgó situando una defensa de tres con Fran, Diego Ruiz y Rubén Primo, dejando las bandas para José Manuel y Javi Méndez. Pero ni las jugadas a balón parado, que eran las más preparadas por locales, encontraban rematador. Hasta llegar al minuto 73, cuando en un córner Emilio marcó el 1-0 y puso el ascenso más cerca. Pero la situación solo duró dos minutos, ya que en el único error defensivo de los costeros, cuando mejor estaba el partido, salían los isleños al contragolpe, que culminó Carlitos en gol. El tanto 'mató' a los aguileños, pero fue la grada volvió a aportar la fuerzas que les faltaban a los jugadores. La última oportunidad la tuvo Xavi, quien pudo hacer el 2-1 en una falta que salía ajustada al palo.

Aún no había terminado el partido cuando la afición aguileña comenzó con cánticos de «Águilas, Águilas» a reconocer la extraordinaria temporada que han realizado sus paisanos. Una ovación que duró bastantes minutos después de pitar el final el colegio. Incluso con la afición visitante en el terreno de juego celebrando el ascenso, el reconocimiento de los blanquiazules superaba los decibelios de los isleños.

La continuidad del Águilas en Tercera, además, provoca que Algar y Minerva se la tengan que jugar el miércoles a una carta para estar en el grupo XIII.