El destino ha querido que los nombres de José Manuel Aira y José Luis Acciari vuelvan a compartir titulares. El sábado, después de la derrota frente al Granada B y de una mala racha de resultados que ha costado al Real Murcia el liderato, el consejo de administración del club grana anunciaba la destitución del técnico leonés y el salto del argentino del filial al primer equipo. Pero no es la primera vez que los caminos de ambos protagonistas se cruzan. Porque el pasado verano, concretamente tras la eliminación del play off, el capitán revelaba las diferencias con su técnico. «Aira me ha dicho que si él sigue como entrenador, prefiere otro tipo de jugador», señalaba en unas declaraciones que sorprendieron por la claridad del hasta ese momento capitán del equipo, que, además, acababa su contrato el 30 de junio. «A nivel personal estoy muy contento con el trabajo que he realizado en la última temporada. Humildemente creo que he sido uno de los mejores del equipo», continuaba Acciari, recordando los ocho goles con los que había ayudado al equipo y su puesto como titular indiscutible.

La batalla la acabó ganando el entrenador, que confeccionaba una plantilla a su gusto y sin José Luis Acciari. Para ello, Aira contaba con el apoyo absoluto de Jesús Samper, quien incluso en rueda de prensa daba un espaldarazo al leonés y lanzaba un consejo al argentino. «Acciari ya tiene la edad que tiene, y yo mismo le he dicho que aunque un jugador nunca quiere retirarse, tiene que pensar en que su fortaleza física ya no es la misma. Creo que es un favor que se hace Acciari, y yo le he ofrecido reconducir la carrera porque le queda mucha vida por delante», explicaba el ya fallecido presidente murcianista.

Era entonces cuando el 'loco', sin ninguna posibilidad de seguir jugando al fútbol en el Real Murcia, decidía hacer caso a Samper y aceptar la propuesta del mandatario para pasar a los banquillos, concretamente dirigiendo al Imperial.

José Manuel Aira, en declaraciones a esta redacción, también hablaba del tema a finales de junio, aunque el leonés, siempre tan prudente, prefirió no hacer leña del árbol caído. «Tuve una charla con él -en referencia a Acciari-, pero no suelo revelar las conversaciones privadas», decía el hasta ayer entrenador del Real Murcia, quien siguió la línea de Samper: «Retirarse siempre es una decisión difícil porque un jugador deja de hacer lo que más le gusta. Pero creo que en este caso, por parte del club, hay un análisis de muchos factores y se ha considerado que ésta es la mejor decisión».

Desde ese día, y pese a seguir compartiendo club, los caminos de José Manuel Aira y José Luis Acciari se separaron. Todo lo contrario de lo que ocurrió con Miguel Albiol. El valenciano, que también colgaba las botas en verano para pasar a formar parte de la estructura de la centenaria entidad -ha entrenado al equipo cadete-, se ha convertido en un apoyo para Aira a lo largo del todo curso, acudiendo con el leonés a muchos de los partidos de los rivales que se iban a enfrentar a los murcianistas.

Ahora, casi un año después, el destino ha querido que sea Acciari el encargado de hacerse cargo de la primera plantilla tras la destitución de José Manuel Aira. Pese a su inexperiencia y a que los que han seguido con asiduidad la temporada del filial consideran que no está preparado para la tarea que le han encomendado, el argentino no ha dudado en escuchar la llamada de un consejo de administración que confía más en la imagen de Acciari, un ídolo para la afición del Real Murcia, que en sus propias virtudes como entrenador. Su primera prueba llegará el domingo en Algeciras, aunque el gran paso lo tendrá que dar durante los play off de ascenso.