Dice Alberto Monteagudo que hace tiempo que no saborea el amargo sabor que produce la derrota. El domingo volvía a ganar en casa frente al Villanovense y acumula de esta manera cinco triunfos en su haber en el tiempo que lleva dirigiendo las riendas del FC Cartagena. El técnico albaceteño se mantiene, además, sin haber perdido un solo encuentro en las once jornadas que está en este equipo, lo que supone dos meses y medio sin conocer la derrota. En este periodo su equipo ha sido capaz de acumular 21 puntos de los 33 en disputa, o lo que es lo mismo un 65% de los que se han jugado.

En una hipotética clasificación en el periodo que abarca la vigencia de su contrato -desde el 9 de febrero-, Monteagudo ha sido superado en este grupo cuarto de Segunda B por un solo equipo, el UCAM Murcia de Salmerón. Este conjunto, recordemos, ocupa la segunda posición en la clasificación a un punto del líder Real Murcia. Así pues, con esa segunda plaza virtual, el conjunto cartagenero ocuparía fase de ascenso y estaría acompañado por La Hoya Lorca, su próximo rival en liga, que también ha sumado 21 puntos en este mismo periodo. El Sevilla Atlético es el cuarto con 20 puntos, los mismos que el Melilla, que sería quinto. Habría que bajar hasta la séptima posición para encontrar al Real Murcia, que ha sumado tres puntos menos que el FC Cartagena en este margen de tiempo, con 18 en su haber.

En el lado opuesto se encuentra el San Roque de Lepe, que en la jornada vigésimo tercera -cuando se marcha Víctor- tenía los mismos puntos que el bloque albinegro pero que a día de hoy es penúltimo, con 33 puntos, porque tan sólo ha conseguido en estas once jornadas sumar seis puntos.

Los méritos contraídos por Monteagudo están fuera de toda duda, ya que justo antes de su llegada el cuadro cartagenerista había sucumbido de forma continuada en tres ocasiones seguidas -Cádiz, Linense y Sevilla Atlético-, por lo que el trabajo del entrenador para hacer levantar a una plantilla destrozada anímicamente ha sido básico para el renacer de este bloque. Con la salida de Víctor Fernández del club, el equipo ocupaba la 13ª posición, con 27 puntos, a tan sólo tres de la promoción por la permanencia y a cinco del descenso directo. El de Valdeganga ha conseguido que el Cartagena remonte seis posiciones, para colocarse séptimo, en puestos que dan derecho el próximo año a jugar la Copa del Rey. Aunque este objetivo es un reto menor, no se le puede quitar méritos a una plantilla capaz de cambiar el chip en todos los aspectos y mirar con otra óptica el tramo final de la temporada.

De igual forma, el FC Cartagena ha mejorado todos los números si los comparamos en su etapa anterior. Los de Monteagudo han recibido tan sólo seis goles en contra en estas once jornadas de Liga, o lo que es lo mismo, 0,5 goles encajados por partido. Con Víctor en el banquillo la estadística era de 1.08 tantos recibidos por jornada, un lastre demasiado pesado y que acabó con las expectativas del entrenador extremeño.

En lo que respecta a los goles anotados, con Víctor los números decían que el FC Cartagena anotaba 0,95 tantos por enfrentamiento, mientras que con Monteagudo la estadística se ha elevado hasta los 1,27 por jornada, más de tres décimas. Además, antes de su llegada el FC Cartagena sumaba seis victorias, frente a las cinco que ha conseguido esta misma plantilla en la mitad de partidos. La última derrota data del 31 de enero, 78 días sin perder, y fuera de casa nadie le ha superado desde que la Balompédica Linense le ganaba por 3-1 el 24 de enero.

A cuatro partidos para la conclusión de la temporada regular, el máximo responsable del vestuario ha devuelto la ilusión a la afición, ha logrado exprimir más y mejor a los jugadores, ha conseguido que futbolistas antes abatidos recobren las cualidades por las que fueron firmados y permite al club que se acabe la temporada con cierto sabor dulce de boca tras el amargor de una campaña que no ha salido como todos esperaban.