El Real Murcia tiene esta tarde un duelo regional en el campo del Jumilla en el que los granas están obligados a ganar para mantener a buen recaudo el liderato del Grupo IV de Segunda B. La visita a la localidad jumilla bien podría tratarse de una excursión en grupo por la cantiad de cosas para visitar en este municipio, pero la expedición grana viaja pensando en muchas cosas, pero para nada con el turismo. El conjunto jumillano va a explotar esta tarde contra los granas su mejor arma, jugar como locales, ya que los vinícolas llevan cinco victorias consecutivas jugando al calor de su público y hoy tienen la firme intención de dar un golpe sobre la mesa dando la sorpresa ante un líder que precisamente fuera de casa es donde mejor se está desenvolviendo últimamente.

Encima los pupilos de José Manuel Aira tendrán que gestionar otro aspecto, la presión de un partido donde los locales tienen mucho que ganar y muy poco que perder, justo lo contrario que le pasa un Real Murcia que ya ha gastado el cupo de sobresaltos si de verdad va a luchar hasta la última jornada por mantener el preciado liderato.

Si las últimas jornadas ha sido el Murcia siempre el primero de los equipos de arriba en abrir fuego, esta tarde los jugadores murcianistas saltarán al céspedl del Polideportivo La Hoya conociendo de antemano lo que han hecho sus perseguidores más inmediatos, ya que el UCAM-La Hoya y el Sevilla Atlético-Linares se juegan este mediodía. Los universitarios son segundos a dos puntos del Murcia y, de hecho, podrían ser líderes provisionales si cumplen esta mañana ante La Hoya. El filial del Sevilla, el equipo que marca la última plaza de play off, recibe al Linares y el tercer clasificado, el Cádiz, visita al Linense a las cinco, por lo que en el descanso del Jumilla-Murcia ya se conocerá el resultado.

Después del mal partido de Viernes Santo en el empate a uno ante el Mérida en Nueva Condomina, el Murcia necesita gnar y encima mejorar bastante la versión que está exhibiendo últimamente ante su público, ya que fuera de Nueva Condomina la cosas es bien distinta. De hecho, los triunfos conquistados ante el Linares, la Balompédica Linense y el Almería B han puesto de relieve que las prestaciones en cuanto a resultados de los murcianistas mejoran lejos de la capital del Segura.

El Jumilla por su parte cuenta con todos sus efectivos disponibles tras recuperarse de sus lesiones Chirri y Neftalí. Vuelve al equipo el danés Tobías Christensen, que no pudo jugar la pasada jornada en Lorca por sanción federativa. Esta temporada el cuadro jumillano ha contado con dos entrenadores en el banquillo: Jordi Fabregat, destituido tras once jornadas y Josico, que estuvo catorce. Lo sorprendente es que el equipo está seis semanas sin entrenador y se mantiene en una línea ascendente que lo ha llevado fuera del descenso.