El UCAM Murcia se desplazó a tierras extremeñas con una consigna clara. En las horas previas al partido se asomaba con insistencia la posibilidad real de recortar distancias con el Real Murcia, que el pasado viernes no pudo pasar del empate frente al Mérida en Nueva Condomina. Volvía a repetirse la historia de la vigésimo novena jornada, en la que el conjunto universitario no consiguió aprovechar la derrota del líder frente al Sevilla Atlético. Pero esta vez, se rubricó con un final feliz para los jugadores entrenados por José María Salmerón, que ya se encuentran a tan solo dos puntos del primer puesto del grupo IV de Segunda División B.

No lo tuvo nada fácil el equipo murciano, que necesitó algo más de media hora para encontrar la recompensa del gol de la mano de Nono I. El pacense se benefició de un mal despeje de Fuentes, tras una internada de Iván Aguilar por la banda derecha, para enviar el balón al fondo de las mallas. Antes, se habían contabilizado hasta tres aproximaciones con peligro favorables al UCAM Murcia, pero ni el autor del gol -que obligó a intervenir al meta local a los 12 minutos de juego- ni Pallarés -que se probó con un remate lejano que se marchó alto diez minutos después- acertaron a marcar.

La escuadra anfitriona no se dejó intimidar y también dio muestras de sus virtudes, aunque tan solo en un par de ocasiones puntuales a lo largo de los primeros cuarenta y cinco minutos. Suya fue la primera acción reseñable del encuentro, que se saldó con un centro de Elías que Víctor no llegó a culminar por muy poco. Cuatro minutos antes del 0-1, Biel Ribas sacó una mano decisiva para impedir que Anxo rematara en el segundo palo.

La sensación de peligro se hacía notar en la mayoría de los ataques del cuadro de la capital del Segura, que pudo ampliar su ventaja antes del descanso. Pallarés, convertido en extremo diestro, envió un balón al área, donde se encontraba Iván Aguilar. El malagueño, rodeado de adversarios, no acertó a rematar bien de cabeza. El encuentro llegó a su ecuador sin que el marcador volviera a registrar novedad alguna.

Reacción extremeña

La segunda mitad comenzó con una versión más ambiciosa del Villanovense, que salió al terreno de juego dispuesto a neutralizar la renta de la que disfrutaba su rival. Cuatro minutos después de reanudarse el encuentro llegó el primer aviso de los anfitriones a través de Elías, quien se hizo con un balón rechazado por la defensa y ejecutó un disparo que se marchó desviado.

Los murcianos apelaban a la tranquilidad que les brindaba su corta ventaja para controlar los impulsos del conjunto extremeño, que volvió a dejarse ver por el área custodiada por Biel Ribas a los 56 minutos de juego. En ese preciso instante, Juanjo estuvo a punto de quedarse solo ante el portero del UCAM, que en la acción posterior detuvo un remate sin apenas peligro. El cuadro universitario, aparentemente más tímido que en el primer tiempo, no se quiso quedar atrás y Jesús Rubio buscó el gol con un lanzamiento cargado de intención. El esférico salió besando el poste.

Pero el Villanovense seguía a lo suyo, intentando generar el fútbol necesario para, como mínimo, lograr el tanto del empate. Muy cerca de hacerse con tan deseado premio estuvo Owona, que, después de varios rechazos, se encontró el balón dentro del área. Su potente remate, sin embargo, se estrelló en la figura de Biel Ribas, que evitó el 1-1 cuando la afición local se apresuraba a celebrar el gol.

La réplica del equipo de Salmerón tuvo como protagonista a César Remón, que anduvo cerca del 0-2. Fuentes, muy atento, impidió que el centrocampista logroñés anotara el gol con el que los visitantes hubieran puesto tierra de por medio en el electrónico a 25 minutos de la conclusión. Los instantes finales asistieron a nuevos intentos del Villanovense, entre ellos el mano a mano que Ribas salvó en el minuto 90, permitiendo que los tres puntos viajaran a Murcia.