Hasta 44 profesionales han defendido los escudos tanto del Real Murcia como del Cádiz en distintas etapas. Unas anticipadamente, otras consecutivamente de un equipo a otro y con solo un traspaso directo: el de Pedro Calatayud Ares Pedrusco (Puerto de Santamaría, Cádiz, 1934) quien pasó por 350.000 pesetas de la época (1961-62) de la tacita de plata a la capital del Segura.

La lista es larga. Comienza con Sorribas y termina, por ahora, con Carlos Álvarez, Alberto Cifuentes y Abel Gómez, demostración actual del evento que, según la Historia del Murcia del terceto Baeza-Garre-García, y el libro gaditano de Jesús Amarillo y Juan Sevilla (Quorum editores), existe constancia de que Antonio Sorribas (Jerez de la Frontera, 1907) fue el primer futbolista que vistió la camiseta grana (procedía del Iberia de Zaragoza) en las temporadas 1932-34 para recalar en el Cádiz, donde ejerció de futbolista-entrenador (1936-39). Lo sigue un murciano, Antonio Nortes, de Espinardo, que jugó muy poco, en el Murcia 35-36, y que sin embargo formó parte del Cádiz, que en la 39-40 jugó contra el Murcia el tan repetido duelo de Mirandilla. En los 30 y los 40, los futbolistas que recalaron en el Cádiz siempre habían defendido anteriormente a los granas como Díaz, Vega, Martínez, Barceló y Modol.

Entre tantos futbolistas, destaca la existencia de las sagas, hermanos, sobrinos y primos que jugaron portando los escudos de ambos. La primera de ellas fue la de los Collar, la de los hermanos Juan de Dios, Pepe, Antonio y Enrique Collar Monterrubio, nacidos todos en San Juán de Aznalfarache (Sevilla), pero que maduraron todos en Madrid y todos en el Atlético.

Los cuatro, diferenciados con los números romanos detrás del apellido, jugaron en el Cádiz de Tercera (1952-53). Este equipo fue una máquina y en donde las actuaciones de Enrique (11 partidos con 7 goles en su haber en las primeras 14 jornadas del campeonato), obligó al Atlético a repescarlo (en su defecto envió a Bouso, un medio volante ). Enrique Collar fue el único extremo izquierdo que le discutió la primacía a Gento, tanto que incluso Villalonga, en su etapa de seleccionador, les hizo jugar juntos: el sevillano por la derecha y el santanderino por la izquierda. En total 16 partidos (4 goles) con la absoluta y 6 con el B, amen , previo de la internacionalidad juvenil y campeón de Europa con la misma.

La saga de los Sornichero, todos ellos de Alcantarilla, comenzó con el mejor: Ángel Sornichero Hernandez (1913) que jugó en el Murcia y el Atlético de Madrid. Sus dos hermanos José (que jugó entre otros en el Hércules y el Rayo Vallecano en las decadas de los 50 ) y Juan (1926) que si militó en el Murcia (48-49) y el Cádiz (en la 53-54). En esa misma temporada Ángel Sornichero Castro, hijo de Ángel y por tanto sobrino de Juan, jugaría en el Cádiz cedido por el Murcia en donde había jugado en las campañas 1957 -59. Esa misma temporada su primo José Meseguer Sornichero, y cedido por el Real Madrid, jugaría con los restantes de la saga.

La tercera saga es la de los Mejías. Los hermanos Pepe (Cádiz, 1959) y Salvador (Cádiz, 1963). El segundo, tras cuatro exitosas temporadas en el Cádiz (1982-86) recaló en el Murcia (86-90), sin que el Cádiz lo pudiera impedir ni cobrar un duro. Un futbolista de carácter, con una capacidad de golear -fue pichichi de 2ª en la 84-85 con 17 goles. Su hermano mayor, José Manuel, se reincorporó después, desde el Zaragoza, jugando con su hermano en el Murcia (88-90).

Gaditanos como Amarillo, Alejandro, Robles, Pedrusco, el ya citado Díaz (de Algeciras), el linense Gallardo, el primer pichichi de la historia del Murcia (1954-55 empatado con Castaño) o Real de Jerez, contrasta con la de murcianos, que aparte de los Sornichero solo aporta a Nortes, de Espinardo; Rubio, de Cieza; o Barrancos de, Murcia. Pocos foráneos en la lista con Husillos en cabeza seguido de 'Tubo' Fernández, el serbio Despotovic y el francés Nafti. Schwandt es un barcelonés, hijo de un austriaco - tenía un hermano, Otto, que jugo en el Cádiz- que recaló en el Murcia desde el España Industrial, que era el filial del Barcelona en los 50. Y en el capitulo de entrenadores la cifra arroja la de siete técnicos: Juan Armet 'Kinké', José Quirante, José Sierra, Fernando Daucik, José Antonio Naya, David Vidal y el último hasta ahora, José González, número escaso para la historia de dos íntimos enemigos.