El traspaso del exmurcianista Kike García al Eibar, club en el que no podrá jugar hasta la próxima temporada al haberse cerrado su llegada un minuto fuera de plazo, ha llevado a los responsables del Real Murcia a desempolvar el contrato con el que hace dos veranos se cerraba la venta del delantero al Middlesbrough por 2,5 millones de euros y en el que se incluían una serie de premios para la entidad murciana siempre y cuando se fueran cumpliendo una serie de condiciones. Uno de esos puntos establecía que las arcas de Nueva Condomina percibirían un millón de euros si el equipo inglés ascendía a la Premier en la temporada 2014-2015, en la que se quedó a las puertas, o en la actual. El otro aspecto destacado de ese acuerdo firmado en julio de 2014 hablaba de que los granas se asegurarían un 15% de la plusvalía en caso de una posible venta. Y en la palabra 'plusvalía' están las malas noticias para el Real Murcia.

Pese a que ayer, nada más conocerse el fichaje de Kike García por el Eibar -traspaso que según distintos medios ingleses ha sido cerrado en 2 millones de libras (unos 2,5 millones de euros)-, muchos fueron los murcianistas que celebraron la buena noticia pensando que las arcas de Nueva Condomina recibirían un regalo extra de unos 350.000 euros, la realidad es bastante distinta y apenas se notará en la cuenta bancaria del club murciano. Porque el 15% que aparece en el contrato que en su día firmaron Real Murcia y Middlesbrough no era sobre la cantidad total de un futuro traspaso, sino sobre la plusvalía que generara la venta del futbolista a otro equipo. Por ello, los murcianistas, que en su momento percibieron unos 2,5 millones de euros, solo sacarían tajada si el precio del delantero se encarecía, algo que no ha sucedido teniendo en cuenta las cifras que se están publicando tras el fichaje del conquense por el Eibar.

Así, a falta de que se conozca el valor exacto del traspaso a través del programa informático que utiliza la FIFA para estos casos, lo que está claro es que el 15% del que tanto se ha hablado solo se aplicará sobre la cantidad que supere los 2,5 millones mencionados. Un revés importante pero que no causa demasiada sorpresa entre personas que están acostumbradas a negociaciones como estas, ya que consideran que este detalle es algo habitual en los contratos y que evita que el club, primero comprador y después vendedor, en este caso el Middlesbrough no salga perjudicado en la operación.

Estas malas noticias para los aficionados de un club que ya echaban cuentas para ver lo que se iba a poder pagar con el regalo que parecía llegar desde Inglaterra llevan a buscar otros aspectos del contrato que Kike García tenía con el club de la segunda división inglesa. Tal y como se ha explicado anteriormente, el Real Murcia en su momento también consiguió que el equipo entrenado por Aitor Karanka se comprometiera a desembolsar un millón de euros si conseguían el ascenso durante la temporada 2014-2015, algo que no lograron, o en la actual.

Aunque la salida del jugador conquense lleva a muchos a descartar que se pueda ingresar esa cantidad incluso produciéndose el salto a la Premier de los de Riverside, en las oficinas de Nueva Condomina prefieren mantener la calma para estudiar a fondo esa cláusula, ya que de su redacción depende que los murcianistas puedan seguir teniendo esperanzas de que ese millón de euros pase a engordar una cuenta bancaria demasiado flaca.

50.000 euros por formación

A la espera de lo que pueda ocurrir si finalmente Aitor Karanka lleva al Middlesbrough a la Premier League, algo que no se conocerá hasa el próximo mes de junio, lo que sí dejará el traspaso de Kike García al Eibar es un pequeño pellizco por los famosos derechos de formación. Teniendo en cuenta que a ese apartado se dedica un 5% del total del traspaso y que la cantidad resultante tiene que ser dividida entre los clubes en los que ha militado el futbolista desde los 10 a los 23 años -en el Real Murcia estuvo durante siete temporadas (de los 18 a los 23 años)-, según los baremos establecidos, la cantidad que percibirá el Real Murcia rondará los 50.000 euros.