El Real Murcia está obligado esta mañana ante el Algeciras a centrarse en lo suyo, lo que mejor se le daba a los jugadores de José Manuel Aira antes de despedir el año 2015 con la trágica noticia del fallecimiento de Jesús Samper, el presidente de la entidad, una situación que ha llenado en panorama de incertidumbre para el futuro más inmediato. Teniendo en cuenta que los granas afrontan una semana en la que tendrán que hacer frente a tres partidos, ya que el miércoles se disputa el choque ante el Granaba B que se aplazó cuando falleció Samper.

Hasta ese momento, el Murcia de José Manuel Aira se había convertido por méritos propios en el rival a batir por todos los equipos del Grupo IV de Segunda B, aunque esta mañana tendrá que demostrar que tiene la firme intención de seguir siéndolo. Los jugadores ya han recibido un mensaje con mucha credibilidad respecto a que no está en peligro sus salarios y nadie piensa en otra cosa que no sea la de que los pupilos de Aira ofrezcan la buena imagen que dejaron en los últimos partidos del año recién despedido. Además la enfermería grana se ha vaciado aprovechando el parón navideño y Aira recupera efectivos tan importantes para el equipo como Isi, Fran Moreno y Sergi Guilló. Otra cosa será si alguno de ellos juega incluso de titular esta mañana, ya que el propio entrenador sabe que necesita encontrar rendimiento en el banquillo si quiere salir por la puerta grande en una semana en la que el equipo podría recuperar el liderato que perdió al aplazar el último partido del año y que ganó con todo el derecho del mundo en la jornada 14 al UCAM, el equipo que actualmente comanda la clasificación.

Encima la prueba que tiene hoy el Murcia es muy peligrosa porque después de ganarle a rivales de mucha entidad en la recta final del pasado año, ahora llegan equipos que, con un perfil más bajo y menos presión que los granas, ya han demostrado que pueden complicarle la vida a cualquier rival de la categoría. Así, el Algeciras llega en estos momentos envuelto en su mejor momento de la temporada, ya que acumula cuatro semanas sin perder contando tres victorias en este tramo. El reto del Murcia es evidente. Cortar la racha de un rival que debe suponer el regreso del Murcia a la senda que dejó marcada antes de que los acontecimientos extradeportivos pasaran a ocupar la actualidad más inmediata de la centenaria entidad.

Hoy toca el Algeciras, el miércoles hay que visitar al Granada B y el domingo de la próxima semana llega a Nueva Condomina el Marbella. Una semana clave en la que el Murcia tiene la oportunidad de demostrar si el parón navideño le ha afectado a una plantilla que iba como un tiro, antes de la incertidumbre que ha generado de manera lógica el inesperado fallecimiento del máximo accionista de la entidad.