El Real Murcia se quedó hace unos días sin la persona más importante que ha formado parte del centenario club en las dos últimas décadas. El corazón de Jesús Samper se apagó a los 65 años de edad de forma inesperada el pasado viernes después de dos semanas de hospitalización, dejando un gran vacío en las oficinas de Nueva Condomina y, en especial, entre sus seres más queridos. Una triste noticia que dejó a la institución grana conmocionada por la pérdida del que ha sido el máximo accionista durante los últimos 17 años. Por todo eso y mucho más, ayer tocó despedirlo de manera muy especial en Murcia. La Catedral fue testigo de una misa funeral en memoria de Jesús Samper en la que no faltaron todos aquellos que le valoraban como persona y que han trabajado codo con codo con él todo este tiempo. Jugadores, empleados, directivos, políticos, empresarios, aficionados... amigos del madrileño que no dejaron escapar la oportunidad de brindarle un último adiós.

No estaba anunciado de manera oficial, pero Juan Antonio Samper acudió desde Madrid hasta la capital del Segura para unirse al acto religioso en memoria de su hermano. El menor de los Samper, acompañado por su hijo Juan Antonio y por Romeo Cotorruelo, vocal de la entidad, recibió las condolencias de todos los presentes. Las muestras de cariño se hicieron presentes antes del funeral y, de manera muy especial, a la conclusión del mismo. La primera persona en dirigirse al que fuera vicepresidente del club durante muchos años fue Noelia Arroyo. La consejera de Cultura y Portavocía acudió en representación de la Comunidad Autónoma acompañado por el director general de Deportes, Alonso Gómez López. También estuvo presente el predecesor en el cargo de Noelia Arroyo, Pedro Alberto Cruz. Murcianista declarado, el exconsejero siempre mantuvo una estrecha relación con la familia Samper y en sus años como responsable del Deporte en la Región nunca dudó en mostrar su apoyo a Jesús en los buenos y en los malos momentos.

Tampoco faltó Miguel Cascales, exconcejal de Deportes y la persona del ayuntamiento de Murcia que más cerca estuvo del dueño del club, sobre todo en la etapa previa a la construcción de Nueva Condomina. Monje Carrillo, presidente de la Federación de Fútbol de la Región, y los exconsejeros del Real Murcia José Luis Morga, Juan Guillamón o Manolo Álvarez fueron algunas de las personalidades que también acudieron al acto religioso que ofició el párroco José María Lozano y que duró poco más de media hora.

Los empleados de la entidad grana acudieron al completo. Como no podía ser de otra manera, en las primeras filas estuvieron el actual vicepresidente económico, Guillermo Martínez Abarca, y el gerente, Víctor Alonso. Dos personas que han estado muy vinculadas a Jesús Samper durante toda su etapa y que desde la pasada temporada son los principales representantes de la entidad en Nueva Condomina.

Los jugadores Armando, Arturo, Fernando, Isi y Simón, junto al segundo técnico Óscar Sánchez, fueron los representantes de la primera plantilla. José Luis Acciari, excapitán del Murcia y actual entrenador del Imperial, y los exjugadores David Karanka y Dani Aquino tampoco faltaron a la cita, al igual que el exrector de la Universidad de Murcia, José Antonio Cobacho. El empresario Antonio Perea, quien mostró interés por comprar el Murcia aunque sin ofertas firmes, y el notario Francisco Tornel, que ahora lidera una plataforma para buscar recursos con el objetivo de hacerse con la gestión del club y quien ayer mantuvo un conctacto con el presidente de la Comunidad, Pedro Antonio Sánchez, también acudieron aunque no se les esperaba.