El Real Murcia volvió al camino de la regularidad al sumar su segundo triunfo consecutivo y olvidar el traspié de hace dos jornadas en el campo del Sevilla Atlético. Con un nuevo triunfo a domicilio, el tercero de la temporada, los murcianistas se mantienen firmes en la lucha por el primer puesto.

A un punto del líder

  • Esta semana dormirán en la segunda plaza, a un punto del líder UCAM Murcia. La victoria ante un Mérida que no vive su mejor momento, aunque hasta ahora iba sobreviviendo en el estadio Romano, permite además ganar confianza a un Carlos Álvarez que abrió el marcador en un saque de esquina, marcando así su cuarto del curso. El tanto del asturiano, que llegó en el minuto 23, daba tranquilidad a los de Aira, que en la segunda parte, cuando más apretaban los locales, vio como Borja, en propia puerta, ponía una distancia que ya sería insalvable para el conjunto extremeño.

Aira no hizo cambios en ataque. Javi López y Fran Moreno se mantenían junto a Germán y Carlos Álvarez. Sí hubo novedades, tal y como se esperaba después de ver la convocatoria del técnico leonés, en la zaga. Cambio de pareja de baile. Con Satrústegui en casa por decisión técnica, Tomás Ruso pasaba a ser el compañero de Jaume Sobregrau.

Empezaron fuertes los locales. Apenas habían pasado tres minutos cuando los de Ángel Alcázar intentaban dar el primer mordisco. Jorge Troiteiro probaba fortuna, pero su balón era para la zaga murciana. Con celeridad contestaba el cuadro murcianista en una veloz internada de Carlos Álvarez, sin embargo el remate chocaba con las piernas del lateral Johny (min. 4).

El partido era de ida y vuelta, y las ocasiones se sucedían en ambas portería. Aunque el Mérida apostaba más por el balón que el Real Murcia, que prefería esperar en la retaguardia.

Tras un breve respiro de apenas cinco minutos, volvió a sacudir el árbol Chino, pero su testarazo se iba por líneas de fondo (min.21). Y designios del fútbol, cuando en la atmósfera del Romano se respiraba oxígeno blanquinegro, el Real Murcia tiró de casta, oficio y? gol. Javi López se iba al banderín, el balón tomaba altura hasta encontrar a Chavero que peinaba para que Carlos Álvarez, astuto como una comadreja, taladrase bajo palos el 0-1.

El Mérida era una locomotora por la banda derecha pero al llegar al destino final, unas veces por mala puntería otras por la hermética zaga murcianista, no paladeaba fruto. Hasta Conde, tras un remate circense, buscó dejar su huello, pero todo se iba a pique.

Se consumía el primer acto y Germán Sáenz, aunque de forma cándida, disparaba directamente a las manoplas de Moreno.

El segundo episodio despertó con el concurso de Martins, una apuesta clara del preparador local para darle más movilidad al juego blanquinegro. La tuvo el carioca en el primer cuero que olió, pero no tuvo a los hados de su lado (min. 46). Y apenas cinco minutos después, el mazazo letal a la postre.

Fran Moreno, en boca de gol, se encontraba un balón suelto que, con la colaboración directa de Borja, convirtió en el segundo y definitivo de la noche. El tanto hundió con el devenir del tiempo a un Mérida que pese a intentarlo de todos los colores no daba con la tecla. Alcázar volvió a su 4-4-2 en rombo con el que inició el choque, pero sin fruto final.

Los murcianos, que un segundo después del gol ponían sobre el tapete a Armando -entró por Fran Moreno- para ganar músculo en el centro del campo y mantener como fuese la ventaja en el marcador. Así, los granas fueron aguantando con aplomo el empuje local. Los cambios de Alcázar, colocando en el centro del campo a Borja y Troiteiro en busca de movilidad, no servían de nada. El Real Murcia se sentía cómodo y no estaba dispuesto a dejar escapar una victoria que ya está en el casillero.

Los tres puntos sumados a domicilio permiten a los de José Manuel Aira colocarse en una privilegiada segunda posición, a sólo un punto del UCAM Murcia.