Hasta la visita del Real Jaén nunca antes se le había atragantado al Cartagena un partido en casa, que pudo empatar e incluso perder. Pero Menudo, a veces más pícaro y otras más frustrado, acaba saliéndose con la suya. De una u otra manera, el sevillano siempre guarda un conejo en la chistera. En el minuto 93, de falta directa, desatascó el encuentro y echó por el sumidero todo el trabajo del Real Jaén.

La primera parte del partido fue igualada. El Cartagena, hasta el minuto 25, tuvo la posesión del balón y las mejores ocasiones, principalmente de Cristo, incrustado entre los centrales del Real Jaén, y de Montero, motivado contra su exequipo. Peleó como un jabato y se inventó un remate acrobático que pudo adelantar a los locales. También el atacante canario, que erró en un mano a mano con el portero.

Entre la incorporación de los laterales al ataque (Jesús Álvaro regresó al once después de su lesión) y la chispa característica de Sergio García en la derecha, la defensa del Real Jaén se vio colapsada, sin un respiro. De hecho, el grupo de Gonzalo Arconada formó un bloque de 4-4-2, con todas las líneas muy juntas y a la espera de sorprender en una contra.

Salvo un error de Ayoze que a punto estuvo Hugo Díaz devsacar tajada, el Real Jaén apenas si pisó campo enemigo. Cuando lo hizo, eso sí, al gol le faltó un pelín de fe. Álex Cruz, un habilidoso extremo que rescató Arconada de su etapa en el Burgos, disparó de libre directo a la cruceta.

Ese golpeó dio ánimos al conjunto jienense, lleno de empaque y lanzado al ataque. Óscar Quesada, un tipo incansable de 37 años, cabeceó un córner en el segundo palo. El balón pasó muy cerca de la portería. Antes lo intentó el capitán Santi Villa, que exigió la estirada de Limones. Al Real Jaén le faltó el gol para ser un equipo rentable, de los que llegan poco y aciertan

Un fallo inexplicable de Álex Cruz privó a los visitantes de adelantarse en el marcador. Limomes estaba en el suelo, vendido, y Cruz tenía que poner la bota para empujar la pelota a la red. Lo vio tan claro que giró el pie demasiado.

Aquello hizo sonar el despertador del Cartagena, amo del partido hasta el pitido final. Rivero tocó la trompeta y sus compañeros se animaron al ataque. De nuevo, como venía siendo habitual en el Cartagena, faltaba el gol. Salió Federico Laens enchufado, y puso el 'Uy' en la grada hasta en tres ocasiones. Lo merecían los de Víctor, en la grada por sanción. Había intensidad, entrega y todos los ingredientes necesarios para sumar tres puntos. Todos, claro, menos el gol.

El inédito Álex Jiménez, inédito esta temporada, añadió más picante en los minutos finales. Hubo que esperar hasta el minuto 93 para que Menudo enchufara una falta desde la frontal.