Cartagena y Linense llegaban a la tercera jonada de Liga sin puntos en el casillero. La necesidad de sumar bien se pudo comprobar en el conjunto local, enérgico y arrollador en el tramo incial de la primera parte. Las ocasiones de los de Víctor Fernández se sucedían y la Balona, abrumada y colapsada, aguantaba el chaparrón como mejor podía: los centrales León y Joe, dos guerreros, taparon las fugas de los visitantes en defensa.

Si el Cartagena gana presencia ofensiva en parte es culpa de Menudo. Por desequilibrio, velocidad y participación en el juego, el sevillano agitó a la defensa rival, buscando huecos donde no los había, para abrir el campo a las bandas. Cristo, titular en detrimento de Jonxa Vidal, dejó algunos detalles técnicos en el carril diestro antes de protagonizar la primera oportunidad de peligro del Cartagena. Remató de cabeza, pero el balón se marchó muy alejado de la portería defendida por Lolo Soler. Acto seguido, Sergio García apuraba hasta línea de fondo para servir a Montero una batería de centros, sin fortuna de entrar en la red.

Dueño de la posesión, constante y peligroso. Al tramo incial de partido del Cartagena le faltaba rizar el rizo, es decir: marcar un gol. Estuvo cerca de suceder. El central visitante Joe se lanzó en plancha para despejar, el balón se estrelló en el larguero y luego botó en la línea de gol. Pero al equipo de Víctor Fernández le tocaba tomarse un respiro, bajar la marcha tras un inicio implacable. Lo aprovechó la Real Balompédica Linense para salir de la cueva y envalentonarse hacia el ataque. Antes de ir al descanso, el mito Ismael Chico, que lleva toda su carrera deportiva en la Balona, remató un balón suelto desde el suelo al palo.

Ya en el segundo tiempo, el guión siguió su línea y el Linense obtuvo el tesoro del gol: el extremo Zamorano apareció en el segundo palo para dispara con dureza a la red. El golpe definitivo lo pudo a los pocos minutos Espinar, el goleador del Villanovense la temporada pasada, que estrelló su disparo en el larguero. Como réplica, el Cartagena respondió, se vino arriba e hizo méritos de igualar el partido, algo que logró en el minuto 80 por medio de una chilena de Gonzalo Verdú.

Antes del pitido final, 'El Tigre' Federico Laens, que entró a sustituir a Montero, se plantó delante de Lolo Soler y lanzó un cañonazo directo al travesaño. Reparto de punto en el Cartagonova que contenta a unos y deja a otros, de nuevo, con la miel en los labios: ante Linares, Cádiz y Linense, el equipo de Víctor Fernández se ha quedado con la mirra. La semana que viene frente al Sevilla Atlético tendrá una nueva oportunidad de colgarse el oro de los tres puntos.