El Cross de la Artillería reunirá este domingo a deportistas de todos los niveles y edades. Una auténtica fiesta del deporte cartagenero y una carrera que trasciende la competición. Los Ortiz García- Vaso son un buen ejemplo de ello. Hasta seis miembros de esta familia participarán mañana en la decimotercera edición de la popular carrera.

Tres generaciones de corredores a los que, de una forma u otra, apasiona el deporte y, en particular, el atletismo. Del más 'veterano' al más joven hay 53 años de diferencia. Feliciano Ortiz es, a sus 77 años, el cabeza de familia. Sus cuatro hijos (Feliciano, de 52; Carlos, de 51; Encarna, de 48; y Antonio, de 33) tomarán también la salida, al igual que uno de sus nietos, Carlos, de 25 años. A pesar de lo que pueda parecer, Feliciano -hijo- asegura que todos llegaron al atletismo por diferentes motivos y en tiempos bien distintos. «No es una cuestión de genes. El primero, obviamente, fue mi padre. Siempre hizo deporte: jugaba al tenis, iba al gimnasio... y, con 60 años, le dio por trotar... y ahí sigue», apunta el mayor de los hermanos Ortiz, todos ellos pertenecientes al Club Mandarache.

Luego fue Carlos el que comenzó a disputar carreras populares. Es, también, el más destacado de todos ellos. Tanto que, a pesar de dedicarse a la abogacía, es un consumado triatleta. Ha disputado más de 30 maratones y un total de 8 'ironmans' (la prueba más exigente del triatlón: con 3,86 kilómetros de natación, 180 de ciclismo y 42,2 de carrera a pie). Y se le da bastante bien. De hecho, acabó tercero en su categoría en el último Maratón de Murcia, disputado hace dos semanas, y fue el mejor atleta regional, también de su categoría.

Feliciano cuenta que su pasión por el atletismo llegó algunos años después: «Yo no había hecho deporte en mi vida. Pero en 2009 corrí el Cross de Cabo de Palos. Fue el primero que se disputaba y mi primera carrera». En su caso, el tabaco fue motivo más que suficiente para engancharse a las carreras populares. «Quería dejar de fumar. Así que empecé a correr. Y, claro, si corres no conviene fumar nada. Desde entonces, no he vuelto a tocar un cigarro en mi vida. Se lo recomiendo a todo el mundo».

Encarna y Antonio, los hermanos más pequeños, siguieron los pasos del resto el pasado año con la disputa, precisamente, del Cross de la Artillería. Antonio fue la grata sorpresa de la familia. Cuando Feliciano cruzó la línea de meta, lo primero que hizo fue decirle a su mujer: «Vamos a esperarle, a ver qué tiempo hace». La contestación de su mujer le dejó sin palabras: «Tu hermano entró hace ya 10 minutos...». Feliciano cree «que entrenó en silencio para sorprendernos a todos», cuenta entre risas. Todos saben, por tanto, lo que es participar en la mítica prueba de Cartagena y el único que se estrenará en la competición será el joven Carlos, al que siempre le dio por el fútbol, pero que por primera vez mañana se calzará unas botas de 'running' para competir junto a otros 4.000 atletas.

Feliciano se deshace en elogios hacia el Cross de la Artillería, del que destaca su «magnífica organización y su apertura a todas las edades». «Es mucho más que una carrera. Para mí, es un evento al más alto nivel. Y lo mejor es ver también a los niños poder participar. Es una gran fiesta para todos». Una fiesta de la que serán partícipes él, sus tres hermanos, su padre y su sobrino. La familia Ortiz.