Onésimo Sánchez ha necesitado cuatro meses para darse cuenta de que no ha sido un revulsivo en el banquillo del Murcia. Es raro, pero el preparador vallisoletano lleva ya muchas jornadas sin conocer la victoria, hasta el punto que recibió un equipo que estaba doce puntos por encima del descenso y lo devolverá con un billete de bajo coste directo para la Segunda B. El sustituto de Gustavo Siviero en el banquillo murciano calificó ayer la victoria de "agridulce" y reconoció después de haber utilizado un verdadero manual de excusas que "cada uno tiene que asumir su parte de culpa".

"Se trata de una victoria agridulce porque es un día muy duro para todos nosotros. No nos queda otra que levantar el ánimo y llegar hasta el final de la mejor manera posible. La realidad es que hemos fracasado y ahora tenemos que ver si podemos apurar las opciones de seguir en Segunda por otra vía", dijo el técnico refiriéndose a la opción de que el Murcia acabe cuarto por la cola y que consiga la permanencia en los despachos por los problemas que tienen algunos clubes para convertirse en Sociedad Anónima Deportiva.

"Lo he dicho varias veces. Me ilusionaba mucho tener una oportunidad en el banquillo de un histórico como el Murcia, pero tengo que reconocer que se trata del peor día de mi carrera como entrenador. No he sido el revulsivo que se esperaba y está claro que he fracasado", explicó Onésimo cuando fue cuestionado por los malos resultados que ha cosechado el equipo desde que llegó a la centenaria entidad.

"Cada uno tiene que presumir de su parte de culpa, pero creo que no es el momento porque podemos ser cuartos por la cola. Se trata de un último esfuerzo por si podemos tener al final un buen balance. Nosotros por si acaso lo tenemos que intentar aunque sea por nuestra profesionalidad", añadió el entrenador grana.

Onésimo, ya en la recta final, volvió a repetir las manidas frases de la falta de gol del equipo y de todas las circunstancias que han rodeado al equipo: "En muchos partidos hemos hecho méritos para conseguir mejores resultados, pero la falta de gol nos ha terminado por condenar al descenso. Yo sigo defendiendo que ha sido un cúmulo de circunstancias y asumo por completo mi responsabilidad. Está claro que nos ha faltado capacidad".