Excepcional, grandioso, sublime, estos son algunos adjetivos que pueden definir la gesta realizada en la tarde de ayer por el joven marchador murciano de Llano de Brujas Miguel Ángel López Nicolás, quien en su primera participación en unos Juegos Olímpicos y con apenas 24 años conseguía entrar por la puerta grande del olimpismo murciano al conseguir una meritoria quinta plaza en la prueba de 20 kilómetros marcha.

Tal y como nos comentaba en la entrevista publicada en el día de ayer, la prueba fue tremendamente táctica, el japonés Suzuki imponía un ritmo altísimo en los primeros kilómetros de la prueba, formándose un grupo perseguidor con los favoritos, y entre los que se encontraba el joven marchador murciano, si bien sería en unos últimos kilómetros de infarto, en los que las amonestaciones y el alto ritmo marcado pasarían factura al grupo que se había desfragmentado por los continuos ataques de chinos y rusos, Miguel Ángel López, con una frialdad impropia de su edad se iba afianzando en las plazas que daban ese codiciado diploma olímpico.

El ganador de la prueba fue el chino Ding Chen, quien consiguió un nuevo récord olímpico, seguido del guatemalteco Erick Barrondo, quien realizo un triunfo histórico al ganar la primera medalla de la historia de Guatemala, y uno de los máximos favoritos al oro, el chino Zhen Wang se hizo con la medalla de bronce.

Miguel Ángel López consiguió realizar un tiempo que batió su mejor marca personal por más de un minuto, y terminó en ese quinto puesto. El campeón de España hizo un lectura de carrera excepcional, yendo de menos a más, ya que a falta de 6 kilómetros para el final marchaba en novena posición, recuperando puestos hasta ese quinto puesto final. Otro que estaba tremendamente satisfecho era su entrenador, el Ciezano José Antonio Carrillo, quien nos recordaba muy emocionado «el anterior diploma, el de Juanma Molina, lo viví paseando por la Atalaya de Cieza, ya que no pude estar en los Juegos de Atenas, pero este lo he vivido en primera persona y ha sido realmente emocionante, lo habíamos preparado muy bien en Font Romeu, Francia, y Miguel estaba realizando unos entrenamientos muy buenos, aun partiendo con la decimonovena mejor marca de los participantes, en condiciones normales debía estar con los mejores, como así ha sido».

El otro representante español, el benjamín de la selección, Álvaro Martín, tuvo que retirarse sin resuello cuando iba último en una competición en la que no se encontró «nada bien». «No he estado a la altura de unos Juegos Olímpicos», sentenció el atleta.