­­Ganar y esperar. Esa es la consigna en el UCAM Club Baloncesto Murcia en el sprint por la permanencia en la Liga ACB. Los murcianistas tienen, en teoría, un buen calendario en casa, que empieza el domingo en el Palacio frente al CAI Zaragoza, donde no pueden fallar para alcanzar la cifra de doce victorias. Sin embargo, tal y como está la competición en sus últimos puestos, les haría falta a los jugadores de Óscar Quintana arañar un éxito más fuera de casa, una misión complicada debido a que tiene que visitar en las próximas semanas a Lagun Aro, Caja Laboral y Real Madrid. Para el final, en la última jornada, queda el choque en la pista del Estudiantes. Pero la clasificación puede dar muchas vueltas y la llave la tiene el actual colista, el Blancos de Rueda de Valladolid. Los pucelanos están prácticamente desahuciados, pero son conscientes de que podrían obrar el milagro en los enfrentamientos directos, ya que por su pabellón tienen que pasar Fuenlabrada, Obradoiro y Estudiantes.

Los fuenlabreños están con diez triunfos y un partido menos por disputar, el que tienen aplazado frente al Estudiantes que se disputará la próxima semana. El marcador que arroje ese encuentro será fundamental para el resto de la competición, al igual que el choque que disputarán este sábado en el Fernando Martín frente a los gallegos, que son los que tienen el calendario más complicado, ya que sólo juegan tres partidos en casa y tienen que visitar a Bilbao, Banca Cívica, Estudiantes y Valladolid.

Los estudiantiles, a los que la ACB les ha permitido aplazar dos encuentros, tienen ahora tres compromisos consecutivos en su pista, pero también tienen que visitar Alicante, otro conjunto que se enfrenta a tres equipos inmersos en el descenso, Real Madrid, Manresa y Valladolid.

Las calculadoras, por tanto, van a echar humo en las últimas ocho jornadas. El problema para los murcianistas es que tienen perdido el average con el Obradoiro, pero aún faltan enfrentamientos directos que serán decisivos.