Toni Moral fue el objeto de deseo del FC Cartagena durante un tiempo, hasta que en la segunda temporada, con Juan Ignacio Martínez en el banquillo y David Buitrago en los despachos consiguió 'cazar' una pieza con la que apuntalar un ya de por sí buen equipo para la segunda campaña del bloque cartagenero en Segunda División.

Moral –Barcelona, 28 de agosto de 1981– se convirtió entonces uno de los pesos pesados del nuevo proyecto cartagenerista y ha gozado de ese estatus hasta hace bien poco. Tanto como el que lleva Carlos Ríos en el puesto de entrenador cartagenerista. El preparador andaluz ha bajado del trono al centrocampista y le ha hecho ver que ha pasado de ser intocable para los demás a prescindible para él.

En los cinco encuentros que lleva Ríos dirigiendo los destinos de este FC Cartagena, el jugador barcelonés ha disputado tan sólo un encuentro como titular –del que jugó media parte– y otros tres partidos como suplente. El último, aquejado de una lesión –así al menos lo justificó su entrenador– no fue convocado.

La irrupción de Ander Lafuente –un caso contrario al de Moral, al menos con Carlos Ríos como responsable de la parcela deportiva– lo ha relegado a la suplencia. El entrenador busca dos jugadores de banda que desborden, desequilibren al rival y dotar al equipo de más profundidad. Moral no ha sido nunca un futbolista pegado a la raya del campo, tiene una indudable calidad técnica y una buena visión de juego, pero en el esquema de Carlos Ríos está aún por ver dónde puede entrar.

Sin embargo, antes no hubo nadie que le tosiera. Juan Ignacio Martínez apostó decididamente por él desde el principio, aunque tuviera que prescindir de una de las bandas. De esta manera, Moral disputó el año pasado un total de 37 partidos, 36 de ellos como titular. Anotó seis tantos y jugó 2.925 minutos, tan sólo por debajo del portero Casilla y del brasileño Botelho –dos de los jugadores destacados en la temporada anterior–.

Esta campaña, con Paco López primero en el banquillo, Toni Moral asumió su rol de nuevo de hombre de banda y jugó tres partidos como titular.

Con su sucesor en el cargo a Moral le fue, en el aspecto personal, igual de bien, porque de los catorce encuentros que estuvo Javi López como responsable del vestuario cartagenerista, jugó 12 de titular, salió uno ya empezado el partido y en el último –ante el Xerex–, no jugó.

Es muy probable que el propio entrenador viera ya que el nivel físico del jugador no era el más adecuado y prefirió darle la oportunidad a otros –Marc Fernández– para ver su respuesta.

Carlos Ríos lo tuvo claro desde el principio. Contra el Huesca salió a falta de 23 minutos, ante el Villarreal jugó la segunda parte; en casa ante el Recreativo salió los últimos 18 minutos y tan sólo ante el Deportivo jugó como titular, pero no lo tuvo que ver nada bien el entrenador, que decidió quitarlo en el descanso. En el choque ante el Hércules lo dejó fuera de la convocatoria y alegó que había estado con problemas físicos durante la semana y que lo mejor era darle descanso.

Son muchas las dudas acerca de su estado actual y de si Ríos va a seguir contando con él o no. Lo cierto es que Toni Moral tiene muchos adeptos, que lo consideran imprescindible en cualquier alineación de cualquier equipo de Segunda División. Hay otros que dicen que ya era hora de que un entrenador le hiciera pisar el suelo y luchara de nuevo como antes por recuperar una titularidad que parecía tener ganada viniese quien viniese al banquillo cartagenerista.