­­El hasta ahora entrenador del Lorca Atlético, Benigno Sánchez, presentó ayer su dimisión irrevocable como máximo responsable del club que preside Cristóbal Sánchez Arcas poniendo fin a un capítulo que ya se estaba alargando demasiado y que desde hace algún tiempo venía perjudicando incluso al equipo.

La relación amor-odio que desde hace bastante tiempo existía entre ambas partes ha culminado con la marcha del técnico lorquino quien en la mañana de ayer convocó una rueda de prensa en una céntrica cafeteria de Lorca para anunciar su decisión. Decisión que llega después de que desde la directiva le hayan impuesto una serie de personas para tomar decisiones.

Benigno comentó que «presento mi dimisión porque se ha producido una situación insostenible que yo no voy a tolerar». «Llevo 18 años entrenando y jamás he aceptado que me impongan nada, ni jugadores ni alineaciones ni nada. Ahora el club me comenta que debo aceptar una nueva línea de trabajo en consenso con otras tres personas. Yo acepté en un principio pensando que la última decisión la tomaría yo, pero como no es así, yo me considero una persona y un entrenador honrado y prefiero marcharme. Se me quita poder y mi figura como técnico pasa a un segundo plano por lo que no lo acepto.No voy a ser una carga para el club, ya que esta temporada acepté rebajar en un 50 por ciento mi sueldo y le he comunicado al presidente mi dimisión sin hablar del tema económico ya que seguro que vamos a llegar a un acuerdo», dijo el lorquino.

«No he pensado jamás que me haría rico en el Lorca.Nunca me he sentido respaldado por el presidente, he estado cuestionado desde el primer día que fui entrenador del Lorca. No fue un error renovar en Lorca, todos los retos que se me han marcado hasta hoy se han cumplido, puesto que dejo al equipo fuera del descenso». El conjunto lorquinista cierra el primer tramo del campeonato sin haber logrado todavía este curso una victoria lejos del Artés Carrasco.