«Este año, el Murcia a Primera». Así recibieron ayer los internos del Centro Penitenciario Murcia 1, en Sangonera la Verde, a dos jugadores granas, Rubén Párraga e Iván Amaya, que rompieron su rutina diaria para transmitir a los reclusos sus vivencias y opiniones a través de una mesa redonda encuadrada dentro de la quincena ´No pares por tu salud´. En la actividad también intervinieron el director del centro, Juan Abellán, y los periodistas Juan Cervantes, editor de Deportes de La 7, Paco Lastra, de La Verdad, y Dioni García, jefe de Deportes de LA OPINIÓN, así como el exárbitro de fútbol Antonio Jávega Jiménez. La única ausencia fue la de Asier Goiria, jugador del FC Cartagena, quien no pudo acudir por tener entrenamiento.

«¿Salís por las noches y hacéis el amor antes de un partido?», «¿del Madrid o del Barça?», «¿no os parece que la selección española debió jugar mejor ante Costa Rica?» y «¿pensáis que los árbitros os perjudican?», fueron algunas de las preguntas a las que tuvieron que enfrentarse los jugadores granas durante casi dos horas en un debate ameno que dirigió Juan Carrión, coordinador de Trabajo Social del centro penitenciario. Tanto Párraga como Amaya, que ya habían tenido experiencias similares en otras ciudades, no se escondieron, pero lanzaron un mensaje mesurado cuando la pregunta fue «¿váis a ascender?».

«Todos los días nos levantamos con la ilusión de hacerlo mejor. Estamos en un momento genial y nuestra meta es alcanzar los 51 puntos para la permanencia», expresó Párraga, quien al igual que su compañero, no habló en ningún momento de ascenso: «El equipo se levantó después de un mal inicio y estamos en una dinámica ganadora», momento en el que Bartolo, un interno que fue miembro de la peña del Efesé ´Los más cañeros´ y que se quedó con la camiseta firmada por los todos jugadores albinegros, le interrumpió para recordarle al defensa que el resultado del derbi fue injusto: «Sí, es cierto, el Cartagena jugó mejor en la primera parte, pero nosotros ganamos», respondió Amaya.

Una de las cuestiones que levantó más sonrisas entre los asistentes fue la relativa a las salidas: «Yo no salgo y, de hecho, tengo un pequeño de ocho meses», apuntó Párraga, mientras que Amaya desveló que antes de los partidos «yo duermo en una habitación y mi mujer y mis hijos, en otra».

La selección española, el Barcelona y el Madrid acapararon también gran parte del coloquio. Mientras que Párraga reconocía que «soy más merengón, pero últimamente me tira más el Barça por su filosofía», Amaya se salía de la norma y apuntaba que «mi equipo es el Rayo porque yo soy de allí». Ambos también trataron de justificar la mala imagen dada por el equipo nacional en los últimos amistosos: «No es lo mismo jugar un partido oficial que un amistoso y la selección siempre se crece cuando llega la hora de la verdad», afirmaron.

Los árbitros también tuvieron mucho protagonismo: «Los árbitros no favorecen a los grandes, los favorecen los grandes jugadores», fue el mensaje que lanzó el excolegiado Jávega Jiménez, quien encontró complicidad en Párraga –«es normal que se equivoquen, como nos pasa a nosotros»–, pero no tanta en Amaya, quien lamentaba que «en algunos partidos de este año, no nos están respetando los árbitros como merecemos».

El acto acabó con las palabras sinceras de Amaya y Párraga, quienes expresaron su satisfacción a los internos por «haber compartido con vosotros este rato», yendo más allá el defensa, quien apuntó que «me solidarizo con vosotros porque sé lo que es pasar por problemas económicos para sacar la familia adelante». Y como colofón, el sorteo de una camiseta firmada por los jugadores del Murcia y del Cartagena, así como un balón del Barcelona con autógrafo de toda la plantilla.