La sorprendente despedida de Roger Federer, que por segundo año consecutivo fue eliminado en cuartos de final, fue el único imprevisto en el guión de la novena jornada del torneo de Wimbledon, en la que no fallaron Rafa Nadal, Novak Djokovic y Andy Murray.

Federer había dominado a su rival hasta la mitad del partido, tenía dos sets anotados y el tercero corría bastante igualado cuando, de pronto, el francés Jo-Wilfried Tsonga encontró la forma de romper el saque del suizo en el quinto juego y revolucionó la pista Central.

Había comenzado el principio del fin para Federer. Tsonga estaba lanzado hacia la remontada. Todos los golpes le entraban y el propio Federer, que no bajó el ritmo, reconoció que no veía la forma de contrarrestar el juego de su rival.

"Creo que (Tsonga) jugó increíble. Realmente desde el principio hasta el final no recuerdo tener ninguna bola de 'break' después de la que tuve en el primer juego", comentó Federer en su rueda de prensa posterior.

Fue la primera vez que el de Basilea pierde en un torneo del Grand Slam después de haber tenido dos sets a favor: 3-6, 6-7 (3), 6-4, 6-4 y 6-4.

Hasta ahora, el seis veces campeón de Wimbledon había ganado todos los partidos de un "Grande" en los que se anotó los dos primeros sets (178).

Frente a la debacle de Federer, el número uno del mundo, el español Rafael Nadal, continuó hoy demostrando su capacidad para superar las adversidades, se apuntó su decimonoveno triunfo consecutivo en el All England Club y se metió en las semifinales, en las que se enfrentará a Andy Murray, esperanza de los británicos.

Lo hizo tras imponerse al estadounidense Mardy Fish, décimo cabeza de serie, por 6-3, 6-3, 5-7 y 6-4, en un partido en el jugó con el pie izquierdo anestesiado.

Nadal sufrió un agudo dolor en el talón del pie izquierdo durante su partido de octavos de final contra el argentino Juan Martín Del Potro, que lo llevó a pensar incluso en la retirada.

Pese a que, en un primer momento, hubo dudas sobre la gravedad del punzante dolor, el médico de la Federación Española de Tenis confirmó el martes que se trataba de una "ligera inflamación alrededor de los tendones peroneos".

Bien el vendaje modificado que le empezó a aplicar ayer su equipo o bien los anestésicos que le suministraron antes del partido, según indicó el propio jugador, permitieron al español ser el gran campeón de siempre.

Nadal es ahora el único español vivo en la competición. Y es que su amigo Feliciano López cayó ante Andy Murray, quien no le dio tregua y le superó en tres sets, por 6-3, 6-4 y 6-4.

"Yo estaba un poco cansado, pero para nada quiero utilizar esto como excusa, pues la única razón fue que el jugó increíble", admitió López.

En la otra semifinal se verán Tsonga y Djokovic. El serbio cumplió con su condición de favorito y superó al australiano Bernard Tomic, de 18 años, que se ha convertido en la revelación del torneo.

"Es muy joven, eran sus primeros cuartos de final en un gran torneo y no tenía nada que perder. Golpeaba muy fuerte y era muy difícil predecir hacia dónde iba a tirar. Era como jugar al gato y al ratón", señaló Novak Djokovic al terminar el encuentro, que resolvió por 6-2, 3-6, 6-3 y 7-5.