Llevaba dos meses sin perder un encuentro en casa y vino el Recreativo de Huelva y le hace tres goles, como en la primera vuelta, a un FC Cartagena que ayer emitió muy malas vibraciones. El conjunto albinegro se vio superado por un rival mejor situado y más efectivo, que supo interpretar mejor el encuentro y que superó a los cartageneristas en ataque y en defensa.

La actuación de la zaga local fue pésima. Demasiada debilidad la que ofrecieron jugadores como Cygan o Botelho, que fue al final la tumba de los albinegros. De esta manera se alejan del reto de jugar la fase por el ascenso de categoría cuando queda lo peor.

Ya no sorprende a nadie que el FC Cartagena reciba al menos un gol en los primeros 20 minutos del encuentro. En esta oportunidad fueron dos, y pudo ser alguno más a lo largo de la primera parte, porque el conjunto entrenado por Juan Ignacio Martínez naufragaba una y otra vez que el Recreativo se acercaba a las inmediaciones de la portería defendida por Casilla.

La debilidad defensiva que suele mostrar el conjunto albinegro lejos de su campo se hizo patente también ayer en el Cartagonova. En las dos primeras aproximaciones del rival llegaron dos goles y solo porque sus atacantes remataron a placer a Casilla, que nada pudo hacer en ninguno de los dos por evitarlo.

Cygan estaba como ausente, como si con él no fuera el encuentro. Errores en la marca o no seguir al defensor fue su aportación defensiva, que pagó cara el equipo. Tampoco anduvieron afortunados Txiki ni Botelho, especialmente el segundo, pero no se puede echar toda la culpa a los zagueros, porque el centro del campo apenas ayudó.

El trabajo de Longás fue casi nulo. Reaparecía tras tres semanas de baja y no tocó casi el balón. Hay que decir en su favor que el oponente ayer estuvo perfecto a la hora de cortar cualquier jugada de creación de los locales. Muy bien plantados en el campo, los futbolistas del Recreativo taparon todos los huecos, bien por colocación bien por cometer la falta precisa en el lugar adecuado para desesperación de los albinegros y de su público.

A los 10 minutos Asen aprovechó un centro al segundo palo para rematar solo y picado de cabeza al palo contrario.

Bastaron siete minutos más para que la frustración de la parroquia llegara con un segundo tanto, en este caso obra de Jesús Vázquez, que remató solo en dos ocasiones tras un saque de esquina botado desde la derecha.

El FC Cartagena no levantaba cabeza, pero sabía que era necesario marcar antes de irse al descanso y así lo hizo Cala, quien cabeceó a la red un buen centro de Víctor de falta en el minuto 42.

El tanto hizo que el arranque de la segunda parte fuera cuando menos intensa por parte de los cartageneristas. Achucharon al Recreativo para buscar un error de la defensa visitante y empatar un partido muy cuesta arriba desde el principio.

Pero la afición se quedó helada cuando vio como en otro balón parado el equipo onubense sacaba petróleo y con un remate de Villar hacía el 1-3 y sentenciaba el encuentro.

El FC Cartagena, que lo intentó con Lafuente, Rodri y Goiria, vio como su presión era infructuosa. Los de Juan Ignacio atacaban sin demasiado criterio, no veían cómo hincarle el diente a un rival que fue mejor en todas las facetas del encuentro y que perdió todo el tiempo del mundo para que el choque se consumiera.

El final se enturbió con la cartulina roja a Botelho, por un manotazo a un oponente, y se llevó la reprimenda de su público.

Matamala a punto estuvo de poner en la puntilla, con un remate a bocajarro que evitó Kiko Casilla.