El Manchester United ha conseguido una importante victoria (0-1) en su visita a Stamford Bridge, en el partido de ida de los cuartos de final de la 'Liga de Campeones', con lo que los de Alex Ferguson encaran con muchas garantías el encuentro de vuelta gracias al solitario gol de Rooney.

El Chelsea volvió a demostrar que esta no es su mejor temporada y su falta de claridad futbolística se hizo evidente a la vez que resultó alarmante escasez de peligrosidad de sus delanteros, especialmente de Fernando Torres, que sigue sin estrenarse como goleador 'blue'. El Manchester aprovechó las debilidades locales para llevarse el partido sin demasiado sufrimiento.

Tuvo que ser uno de sus mitos vivientes del United el que allanara el camino de los suyos. El eterno Ryan Giggs recibía un pase cruzado desde a derecha y con un sutil toque se marchaba de Bosingwa para ganar la línea de fondo y dejar en bandeja la bola a Rooney que definía con un buen toque raso al palo largo en el minuto 24. El tanto visitante rompió el choque, que se convirtió en un intercambio de golpes entre ambos contendientes.

En esa guerra abierta, el Chelsea apeló más a las ganas que al fútbol mientras que los de Ferguson se encomendaban a su peligrosa dupla atacante, formada por el propio Rooney, así como por el emergente 'Chicharito Hernández'.

Con la eliminatoria muy cuesta arriba tras el 0-1, el Chelsea, movido por la necesidad, volvió a calcar su decepcionante primera parte. Quiso volcarse en el área visitante a base de coraje pero de nuevo, la inexistencia de claridad en su fútbol no ponía en ningún aprieto a su adversario, que vivió una plácida segunda mitad. Sería 'El Niño' el que pudo igualar la contienda, pero Van der Sar negaba el estreno goleador del español con una fenomenal estirada.