Cuando nada funciona no hay manera. Dice una canción de Rublén Blades que "si naciste para martillo del cielo te caen los clavos". Una ferretería entera le cayó ayer a un CB Murcia impotente, carente de ideas y de intensidad en su intento de jugar un partido de baloncesto frente a un Meridiano Alicante que por momentos se gustó y disfrutó apalizando al equipo murciano, en el encuentro con la victoria más abultada de la historia del equipo alicantino en ACB.

Durante los primeros minutos, en los que hubo un atisbo de partido de baloncesto, los jugadores de Oscar Quintana trataron de jugar con Katelynas, aunque el lituano no logró encestar en sus primeros intentos, lo que hizo que Hill tratara de jugarse algunos balones con mejor fortuna. Mediado el primer cuarto Katelynas empezó a ver el aro y a lanzar tiros liberados, desde todas las posiciones, lo que le permitió anotar 11 puntos que abrieron la primera brecha en el marcador y la puerta para que todo el equipo alicantino se sumara a la fiesta anotadora ante un indolente CB Murcia.

Sólo Vujanic fue capaz de anotar con cierta facilidad en el aro del Meridiano Alicante, no sólo en los minutos inicales, sino durante todo el partido, aunque su defensa fue tan pobre como la de sus compañeros. Los 25 puntos del serbio fueron poco argumento para un equipo que no parecía jugar un partido de competición.

Tres triples casi consecutivos de Katelynas, Cazorla y Llompart pusieron en el marcador la primera ventaja superior a los diez puntos para el Meridiano Alicante (25-15), diferencia que ya no haría otra cosa que ir creciendo paulatinamente con el paso de los minutos.

El CB Murcia no hacía bien las ayudas defensivas, o éstas llegaban tarde o eran demasiado blandas como para impedir la canasta rival. La defensa interior era excesivamente blanda y Moncho Fernández no encontraba solución a los males de su equipo.

Los jugadores alicantinos ya se veían mejores que los del CB Murcia, se crecieron, se gustaron y se permitieron incluso el lujo de jugar a correr, llevando las ventajas hasta los 20 puntos de diferencia (53-33). A esa altura del partido a los jugadores del Meridiano les salía todo y los del CB Murcia ya no eran capaces siquiera de subir el balón sin botársela en el pie. Nada le salía a los murcianos, fuera de partido antes incluso de llegar al descanso. Para entonces el CB Murcia ya ni estaba ni se le esperaba.

El tercer cuarto fue una pura avalancha de los de Oscar Quintana, el CB Murcia hacía rato que estaba en estado de shock. Un apagón general se había cernido sobre el juego y actitud de los de Moncho Fernández, que encajaron 37 puntos en ese cuarto en un visto y no visto, mientras la grada del Centro de Tecnificación de Alicante rugía y disfrutaba de lo lindo con el espectáculo que estaba brindando su equipo.

Si el CB Murcia se ponía en zona el Meridiano le contestaba de inmediato con un triple de Jorge García, Llompart, Hill o quien quiera que se sumara al festín. Hasta ocho jugadores del Meridiano Alicante lograron anotar más de 10 puntos, mientras que por el CB Murcia sólo Vujanic logró cifras destacables gracias a sus 25 puntos, secundados por otros 11 de Delininkaitis. Ningún jugador murcianista más se aproximó a las dobles figuras. Moss, un baluarte de los rebotes en partidos anteriores apenas logró 4 rechaces, estando igual de desacertado que sus compañeros en la labor ofensiva.

El último cuarto apenas sirvió para conjeturar con cuál sería la ventaja final del Meridiano Alicante y si ésta llegaría, como al final hizo, a cifra récord en la ACB, pues con esta paliza por 44 puntos de ventaja el equipo alicantino lograba su victoria por más puntos en todos los años que lleva en ACB, siendo su anterior mejor marca un 99-64 logrado frente a Estudiantes en la temporada 2004-05.

Hasta Oscar García, prácticamente inédito en lo que llevamos de temporada, pudo jugar un cuarto casi completo en un tramo final de partido en el que los jugadores del CB Murcia sólo parecían esperar que acabara el partido cuanto antes, si bien esa impresión ya se transmitía desde el primer cuarto.

Este equipo está tocado, lo que antes eran rachas de falta de lucidez se ha convertido ahora en apagón general, en una impotencia e incapacidad que le duró todo el partido.

El próximo jueves visita el Palacio de Deportes de Murcia el Xacobeo Blu:sens, otro de los equipos supuestamente débiles de esta liga. Una derrota ante el equipo gallego desataría, casi sin lugar a dudas, movimiento de fichas en el club.