Todavía hay gente a la que le cuesta reconocer que el arte pueda salir del lienzo; que puede tomar las calles de la ciudad y romper con la monotonía de paredes lisas y colores apagados sin dejar de ser..., eso, arte. Pero, por suerte, cada vez son menos. Y es que el grafiti -en sus diversas modalidades- ya no es solo cosa de adolescentes descarriados... Las grandes leyendas del arte urbano van cumpliendo años, igual que sus fanáticos, y hoy son muchos los que han cambiado las fachadas y los vagones por los marcos de un museo; de la misma manera que los que en su día se interesaron por el espray o el stencil hoy pagan millonadas por obras de Banksy. Porque sí, el street art está de moda, gusta a grandes y pequeños y, en las instituciones, han pasado de perseguirlo a fomentarlo.

Este último el caso, por ejemplo, es del Ayuntamiento de Alcantarilla, reconocida por Unicef como ‘Ciudad Amiga de la Infancia’ para el periodo 2018-2022. El distintivo no es baladí dada la cuestión tratada, ya que la Concejalía de Cultura del municipio ha decidido conmemorar el Día Internacional del Niño (20 de noviembre, el próximo viernes) con la celebración del primer Festival de Arte Urbano de la localidad; un proyecto desarrollado por el colectivo Murcia Street Art Project que reunirá en Alcantarilla a algunas de las figuras más destacadas del grafiti en la Región, así como a varios nombres de entidad nacional y respeto internacional. Hablamos, por supuesto, de Carlos Callizo y del cartagenero Kraser -muy reclamados, ambos, en el extranjero-, pero también de los madrileños Dan Ferrer y Sfhir, entre otros. En definitiva, maestros muralistas con una misión: reinterpretar a través de la pintura, y entre esta misma tarde y el próximo sábado, cada uno de los Derechos del Niño, aprobados precisamente un 20 de noviembre de 1959.

En total serán diez (artistas y murales), tantos como puntos incluye la citada normativa, de modo que a los ya citados se sumarán Nenwapa, desde Valencia; el oriolano Mr. Chapu; los también murcianos Goyo203 y Rayajos, y dos artistas locales: Félix M. De la Paz y Lucía Viudez. «Hemos tenido que buscar artistas teniendo en cuenta los problemas de movilidad actuales, pero estamos muy contentos con cómo ha quedado la convocatoria. Por desgracia, no hemos podido traer a nadie de fuera de España; nos hubiera gustado contar con algún referente internacional...

Pero, por suerte, tendremos en Alcantarilla a artistas nacionales que, si no llega a ser por la pandemia, sería casi imposible tenerles por aquí porque tenían compromisos en otros países por estas fechas», señala el comisario y galerista Darío Vigueras, director artístico de este proyecto y cabeza visible de Murcia Street Art Project. «Callizo y Dan Ferrer tenían trabajos en Centroeuropa este mes, por ejemplo», añade el experto, que además de la posibilidad, ha prestado mucha atención a los «perfiles» para armar la lista de invitados del festival: «Queríamos gente que se pudiera adaptar al concepto que desde el Ayuntamiento nos habían planteado. A mí hay algunos artistas de grafiti geométrico que me gustan mucho, pero no tenía sentido apostar por algo así; sería absurdo», explica.

Por ello, la presencia de Dan Ferrer, por ejemplo, era casi innegociable. «Ya le tuvimos en el Muram -Vigueras y Street Art Project fueron los principales responsables de la exposición Leyendas callejeras (2019) del Museo Regional de Arte Moderno de Cartagena- con La primera puñalada, una obra muy potente y con mucho significado. Sus trabajos siempre dicen cosas, no están puestos al azar... Él es experto en contar historias, en plasmar sentimientos, y la familia y los niños siempre están muy presentes en su producción, con lo que era perfecto para este festival», apunta el galerista, que también destaca a la Nenawapa, abanderada del stencil -técnica centrada en el uso de plantillas- y que, «por los motivos que trata, podía encajar muy bien en el proyecto».

En cuanto a los demás, los mundos fantásticos y fabulados de Mr. Chapu y Goyo203 -muy cercanos al colectivo- también se antojaban idóneos para reinterpretar los Derechos del niño, mientras que Sfhir ya ha trabajado en la Región -tiene varios murales en Los Alcázares-, con lo que su visita para este festival podía ser también factible y, sobre todo, un salto de nivel. Por último, Félix y Lucía, los alcantarilleros que completan el cartel, son una apuesta de la organización: el primero lleva años entre botes de pintura, pero casi siempre ha trabajado por encargo, mientras que Viudez ya ha ganado varios concursos de arte en la localidad y éste será el momento de tomar su particular alternativa.

Un museo al aire libre

Callizo y la Nenawapa serán los primeros en aparecer, hoy mismo, por Alcantarilla. El murciano estará a la altura del número 76 de la calle Mayor, mientras que la valenciana estrenará el espacio preparado en la Plaza de Cayitas para acoger seis de los diez murales (los otros tres estarán, uno junto al de Callizo, y dos en la Plaza Campoamor). Dan Ferrer se unirá mañana a ambos con el fin de que el viernes, Día Internacional del Niño, haya al menos tres trabajos avanzados. Y es que será entonces cuando se unan el resto de los artistas, que estarán trabajando hasta última hora de la tarde del domingo «con todas las medidas sanitarias pertinentes. Además -añade Vigueras con sorna-, ellos ya están muy acostumbrados a trabajar con mascarillas...».

La idea, por supuesto -más allá de conmemorar una fecha tan señalada y mostrarle a la gente cada uno de esos diez derechos de la infancia-, es convertir estas plazas en pequeñas salas de exposiciones al aire libre y, con ello, brindar un balón de oxígeno al arte en la Región. «En este momento, las actividades en museos y galerías están siendo muy light: no hay inauguraciones oficiales, los aforos son muy limitados, las medidas de seguridad condicionan los eventos..., y luego está el ‘miedo’ de la gente a estar en lugares cerrados», comenta Vigueras, que tiene una pequeña galería en la Plaza Yesqueros de Murcia.

«Entonces, en este contexto -continúa- apostar por la calle es acercar el arte a toda esa gente que se ha visto alejada de estos espacios por las circunstancias actuales, pero también a la gente que tiene que salir por las mañanas para ir a trabajar o hacer la compra». Y concluye: «No podemos parar. Estando como están las cosas, tenemos que intentar sacar proyectos así hacia delante como sea, e intentar, dentro de esta ‘normalidad anormal’, seguir trabajando para ayudar al sector, a los artistas y a la sociedad».

Callizo: "El coronavirus ha paralizado por completo el arte urbano"

Uno de los protagonistas del Festival de Arte Urbano de Alcantarilla será el murciano Carlos Callizo, un rara avis dentro del grafiti. Doctor en Bellas Artes y profesor de la Universidad de Murcia, ha hecho inverso el camino de aquellos que triunfan con el espray: mientras otros pasan de la calle al estudio, él llegó a los muros procedente del lienzo. Y, desde luego, en vistas del reconocimiento que ha ido obteniendo en los últimos años -con murales en centroeuropa, exposiciones en China, etc.-, el cambio no le ha ido mal.

Con un estilo muy característico y en el que los rostros y el color dominan la escena, Callizo comenzará hoy a esbozar sobre una pared de la Calle Mayor de Alcantarilla su interpretación del Derecho al juego. «Me parece un proyecto muy interesante. Además, a nivel artístico, me gusta que nos pongan un tema. Creo que te exige, y eso siempre es enriquecedor», apunta el artista, que aunque ya tiene en la cabeza el mural con el que decorará la concurrida avenida, es partidario de no desvelar demasiado... «Cuando estaba preparando el mural de La Paz, en Murcia, me encontré con mi propio boceto en las páginas de un periódico antes de que lo pintara, así que prefiero mantener la sorpresa», apunta entre risas.

Y es que Callizo está contento de poder volver a la calle; algo que, dada la situación de crisis sanitaria, no está siendo nada fácil para los artistas urbanos. «Yo tenía un proyecto en Génova este año y, en agosto, debía haberme ido a Rusia para pintar sobre un edificio de once pisos. Y, este mismo mes, tenía previsto ir al Caribe. Pero todo se ha suspendido o se ha aplazado hasta 2021. El coronavirus ha paralizado al arte urbano», asegura.

Por suerte, gracias al festival de Murcia Street Art Project y la Concejalía de Cultura de Alcantarilla podrá quitarse «el mono». «Ya no es solo por una cuestión económica, es que nos gusta pintar en la calle y lo echamos de menos. El año pasado hice 15 murales, más de uno al mes, yendo de Estambul a China, pero ahora viajar no es fácil...», lamenta.