Las sombras se endurecieron ayer en Cartagena. Cada rincón, cada callejuela, escondía crímenes de amarga resolución; cada página en blanco se tornaba en víctima potencial, y El Batel, en una guarida de maleantes, ladrones de medio pelo, asesinos y turbios y enigmáticos detectives. Todo lo dicho, por supuesto, encerrado en la prisión de la mente y solo materializado a través de la tinta de una treintena de escritores de todo el país que eligieron en el noir el género a destripar.

Ayer comenzaron -y ya van tres años- las Jornadas de Novela Negra, Policiaca y de Misterio de la ciudad portuaria, más conocidas como Cartagena Negra, con un acto que discurrió íntegramente en El Batel y que se inició con la intervención de la alcaldesa de la ciudad, Ana Belén Castejón, y Francisco Marín, director del festival. Además, el evento también sirvió para presentar en sociedad la I Antología de Relatos Cartagena Negra, que recoge 23 textos de autores de ámbito nacional y una muestra de autores regionales que han ido pasando por el festival en anteriores ocasiones. Esta colección de relatos ya está disponible y tiene un coste de diez euros.

Pero incluso antes de hablar de su libro, el festival dio paso a la acción, y lo hizo con el primero de sus invitados. El moratallero Esteban Navarro fue el protagonista de la primera 'Conversación negra' entre escritor y lectores; el primero, como se ha señalado, de una treintena autores entre los que se encuentran Xabier Gutiérrez, Graziella Moreno, Carlos Dosel, Pedro Martí, Montse Sanjuán, Juanjo Braulio, Jon Arretxe o incluso el Premio Nacional del Cómic Javier Olivares; autores que pasearán por Mister Witt Café, el Batel y la librería Santos-Ochoa hasta el próximo sábado, cuando tenga lugar la clausura del festival y la entrega del Premio de Novela Cartagena Negra a Rafa Melero por su libro Ful.

Este año, la presencia de las fuerzas del orden, el tratamiento del mal y el género negro producido junto al Mediterráneo constituirán las tres líneas temáticas principales en torno a las que girará el festival, que ya se ha hecho con un lugar de renombre en el panorama nacional. También habrá espacio para la música y el mundo del cómic o para el audiovisual en forma de cortometrajes.

En esta edición se buscará, además, una mayor implicación del público mediante la organización de actividades lo más atractivas posibles como un Taller de Escritura Policíaca impartido por la escritora Clara Peñalver, el Concurso de Microrrelatos Negros en vivo 'Deje aquí su sombrero' -cuyo requisito indispensable para poder participar consistirá en acudir portando este complemento, y que tiene un premio para el ganador de una cena para dos personas y una noche de hotel en Los Habaneros- o 'Menudos detectives menudos', pensado para los más pequeños.

La noche terminó con la inauguración de la exposición Collage Negro, a cargo de la Sociedad de Collage de Cartagena. Más de sesenta artistas internacionales y más de setenta obras que muestran las diferentes visiones del género noir para sus respectivos autores.