¿Será la segunda vez que contemple este festival como alcalde ¿Qué supone para usted?

Es sobradamente conocida la importancia del Festival de Lo Ferro en el mundo del flamenco por la repercusión mediática que tiene, por su altísimo nivel y la trascendencia profesional en los ganadores de los distintos premios del concurso para su futura trayectoria, y por lo que supone para Torre Pacheco poder celebrar en su municipio el tercer festival de flamenco más importante del mundo. Es un orgullo como pachequero, pero más si cabe poder disfrutarlo como alcalde y poder representarlo. Soy plenamente consciente de lo que supone este festival y la enorme responsabilidad de promoverlo y ponerlo en valor desde el Ayuntamiento, ya que estamos hablando de nuestro mejor embajador cultural.

¿Qué significado tiene para el municipio convertirse un año más en uno de los enclaves nacionales del flamenco?

El Festival de Lo Ferro es una referencia cultural de primer orden. Durante el mes de julio este barrio de Roldán se convierte en capital mundial del flamenco, relevancia que viene a sumarse posteriormente en agosto con el legendario Festival Internacional del Cante de Las Minas de La Unión, pudiendo presumir de nuestra comarca y de su entidad en el mundo de la cultura y el flamenco.

¿Qué grado de expectación percibe entre la población?

El pueblo de Roldán está ilusionadísimo con este festival, sienten pasión por él y se vuelcan plenamente en todo lo que supone ayudar y participar en su actividad más conocida. Abren las puertas a todos los visitantes que tienen el honor de asistir a su barrio más antiguo y con mayor solera y carácter propio. Son partícipes del alcance de este certamen y lo viven, no solo la última semana de julio, sino durante todo el año, ya que este festival tiene una programación complementaria con galas flamencas de invierno, actividades solidarias y un amplio abanico que hacen de Lo Ferro Flamenco un acontecimiento social de primer orden.

¿En qué consiste la aportación que ha hecho este año el Ayuntamiento?

El Ayuntamiento apuesta plenamente por este festival, poniendo a disposición del mismo los operarios municipales (jardinería, mantenimiento, electricistas, etc.), así como los técnicos y personal de cultura y turismo, difusión y promoción, volcándose en la preparación del mismo con un dispositivo especial de Policía Local y Protección Civil, que garanticen el tráfico y estacionamiento de los cientos de vehículos que acuden al pequeño barrio de Lo Ferro, además de las labores de limpieza viaria, refuerzo de alumbrado público, señalización, etc. Dentro de la línea de colaboración a través de subvención municipal para ayudar en el costo económico que supone este evento, se aportan desde el Ayuntamiento 53.550 euros al año, aunque estamos intentando incrementar esa cuantía a pesar de la precariedad en la que nos hemos encontrado las arcas municipales.

¿Qué espera de esta nueva edición del Festival?

Mantener el alto nivel conseguido después de treinta y siete años ya requiere, por sí mismo, un alto esfuerzo por parte de la organización del Festival, pero siempre permanece el objetivo de superarse continuamente, edición tras edición y que, por descontado, este XXXVIII certamen va a estar, con creces, a la altura que se le supone a este festival en el panorama internacional del flamenco.