Ramón Garza volvió a exponer en Murcia. Fallecido en 2014, lo hizo de la mano de su hijo, José García Chillerón, quien ha recogido la obra de su padre en una gran retrospectiva que fue presentada ayer en el Museo de Bellas Artes de Murcia (Mubam).

Bajo el nombre Ramón Garza. Geometría de la lucidez, la muestra reúne cerca de setenta obras, pinturas y esculturas, a través de las cuales el visitante podrá realizar un recorrido por la figura y la trayectoria de uno de los representantes más interesantes y complejos del arte reciente de la Región de Murcia.

La directora general de Bienes Culturales, María Comas, declaró que «tras la exposición centrada en la escultura que este mismo museo acogió en 2010 con motivo de su ampliación, ésta es la primera gran retrospectiva que se realiza de Garza y que permitirá a todo tipo de público conocer la obra de quien fuera uno de los creadores más interesantes y complejos de los años setenta y ochenta de la Región».

Hijo del poeta Federico García Izquierdo y amante del cine, la música y la literatura, su gran pasión fueron las artes plásticas. Admirador de Vela?zquez y Picasso, Garza se formó en la Escuela de Artes y Oficios y siempre reconoció como su maestro al pintor José María Párraga. En la Región, «son escasas las ocasiones en las que se ha exhibido la obra de Garza en galerías, salas o museos», afirmó la directora general, quien recordó «la humildad y el poco interés que Garza manifestaba por todo aquello que no fuera la búsqueda de su propio lenguaje». «Ahora, nos corresponde a todos nosotros, a sus herederos y a quienes trabajamos en el mundo de la cultura, contribuir a la difusión de la obra que Garza nos dejó, haciendo de algún modo justicia a su memoria y permitiendo que las nuevas generaciones se acerquen a este gran creador», añadió la directora general.

Para esta exposición se han catalogado 156 obras, entre pinturas, esculturas y dibujos, además de diez serigrafías y trabajos de diseño. Además de obra de los fondos de la Comunidad Autónoma y piezas que están en posesión de la familia, se expone en el Mubam obra prestada por numerosos particulares, lo que, según Comas, «hace que esta exposición sea aún más exclusiva y única».

Diferentes etapas

La exposición arranca con alguna obra de finales de los años sesenta y las creaciones realizadas en la primera mitad de los setenta, cuando Garza posee ya un hueco en la escena artística murciana. Dibujos de tinta china y acuarelas dan paso a cuadros de mayor formato y a oscuras obras en las que, bajo la influencia de creadores como Bacon y de la herencia del cubismo, realiza interesantes estudios volume?tricos.

En los ochenta, el estilo de Garza evoluciona y el color y la luz inundan su pintura, ofreciendo una mirada más optimista. El autor apuesta por la simplificación de las formas y tiende hacia la pureza geométrica como elemento fundamental de la composición pictórica.

El siguiente cambio notable en su obra fue a finales de siglo, cuando abandona la ciudad para trasladarse a la huerta y la naturaleza empieza a cobrar protagonismo. Crea a partir de entonces cuadros menos crípticos donde la naturaleza muerta, la figura humana y el color son protagonistas, junto a la textura de los tableros OSB, en obras inéditas hasta ahora.

Ramón Garza. Geometría de la lucidez se inaugura este viernes a las ocho de la tarde y se podrá visitar hasta el 19 de marzo.