Aitite es el nombre artístico del geniecillo excéntrico y carismático Alberto García Roca, murciano residente en Valencia y líder del grupo, del que forman parte también Guardabosques, Oso Peligro y El Verdadero. Sorprenden en sus directos como «aliens kamikazes bailando punk étnico», según su propia definición. Aitite nos lo aclara.

¿Qué indica el nombre de Alien Tango? ¿Qué pasó por tu cabeza para dar con ese nombre?

Es un anagrama de mi alter ego, y todavía no ha llegado el momento de revelarlo. Por mi cerebro debieron pasar impulsos eléctricos de diversa índole.

Al grano. ¿En qué consiste la propuesta de Alien Tango?

Mi propósito es representar musicalmente las sensaciones que me producen los helados que voy probando a lo largo de mi vida (por eso compongo y grabo en verano). Me flipan los helados; de hecho el otro día probé el Maxibon nuevo de chocolate blanco y de ahí salió una canción que creo que va a ser mi opera prima.

Del título de Supernatural Mango asoma como un aroma tropical, una especie de macedonia dulce y ácida a partes iguales. ¿Era algo preconcebido?

Es puro concepto. Un día desperté de una de mis legendarias siestas con mucha hambre y, pensando en cómo sería mi sabor de helado perfecto, las palabras acudieron a mí. Supernatural Mango.

En una entrevista comentabas que el sonido del EP se caracteriza porque no sabes tocar prácticamente ninguno de los instrumentos que suenan. ¿No es un poco pretencioso?

Es la verdad, y creo que basta con escucharlo para darse cuenta. Encontré muchos instrumentos que me apetecía meter en el EP, y no conocía a nadie que supiese tocarlos, así que tuve que chapurrearlos yo. Creo que el hecho de que no sepa tocarlos y se oigan ligeramente desafinados le da un toque al EP que se agradece, más punk. Además, con el aire de humor que tienen las canciones, creo que lo pretencioso sería haber contratado a alguien para que lo tocase todo perfecto.

Qué es el ´instrumento maldito´?

Un instrumento de cuerdas de 1905 comprado en un mercadillo de Berlín, totalmente inafinable y que huele a la catacumba de Fumanchú IV. Lo toques como lo toques, suena a efecto especial de película de terror, así que lo incluí en I Don´t Wanna Die.

Si tuvierais que decir algún grupo con el que guardáis semejanza, ¿cuál sería?

Sidonie.

De Alien Reverend a Alien Tango. ¿Por qué? ¿Qué nos perdimos con Alien Reverend? ¿Hubo más vida antes de Alien Tango?

Nadie me entendía cuando decía Alien Reverend en voz alta, y dejó de gustarme la connotación religiosa. Os perdisteis un par de conciertos acústicos lamentables y canciones que jamás saldrán del baúl de los recuerdos. También monté un grupo de progresivo muy friki llamado Avant-Garden que prometía bastante, pero duramos dos conciertos.

Ganasteis el concurso TalentoSos y tocasteis en el festival. ¿Cómo relatáis la experiencia?

Genial, fue increíble ganar un concurso como el TalentoSos en nuestro cuarto concierto, y yo soñaba con tocar en el festival. Sin embargo es una lástima que nos hiciesen tocar el domingo a las 12 de la mañana cuando se supone que buscan promocionar a las bandas de Murcia. Da la impresión de que no hay mucha confianza en la escena emergente.

¿Se siente Alien Tango dentro de la tan nombrada escena murciana? ¿Cómo se ve desde vuestra atalaya valenciana?

No lo sé, por las redes veo mucha discusión alrededor de la escena. Parece que hay algún tipo de cisma que divide a grupos, periodistas, etc., y no sé en qué lado se me sitúa exactamente, ya que me es totalmente ajeno y no me pronuncio al respecto. Aunque ya no estoy en Valencia, desde mi atalaya ignorante me parece absurdo que haya mucho drama fuera de lo que realmente importante: la música.

Comentas que el disco ha sido grabado «en diversos dormitorios con instrumentos medio rotos». ¿Exageración, licencia poética? ¿Con qué medios habéis contado?

Entre el sitar, que prácticamente implosionó tras grabarlo, el instrumento maldito, un acordeón sexagenario, un piano desafinado y una guitarra acústica que ha estado enterrada en la arena ya unas cuatro veces, creo que se puede afirmar con más o menos tranquilidad que no grabé el EP precisamente con los medios de Abbey Road. Los medios han sido una tarjeta de sonido de 100 euros, un mac, un micrófono Shure SM-58 y los instrumentos. También utilicé una grabación de lluvia hecha con el móvil.