­­­El director de cine José Luis Cuerda adaptó al cine, en 1990, la novela de Pedro García Montalvo Una historia madrileña para su película titulada La viuda del capitán Estrada, por la que sigue cobrando desde hace 26 años «derechos de autor por la SGAE». Apasionado del cine, del fútbol y de la literatura, la mayoría de sus novelas transcurren en Madrid, «ciudad, después de Murcia, que no cambio por ninguna otra capital europea o del mundo».

¿Cúanto tiempo hace desde que publicaste tu última novela?

Hace siete años. Tengo recién terminada otra novela que, de momento, no puedo publicar por los problemas de ser pensionista. He intentado buscar una solución pero en todas las instancias a las que me he dirigido, aunque son muy receptivos, me dicen que como no tenemos un Gobierno efectivo, sino en funciones, no se puede atajar el problema.

¿De qué trata tu nueva obra?

Es una historia doble, o dos historias relacionadas entre sí; una que se refiere al amor y la otra a la muerte. Y sí, transcurre en Madrid. Me gusta que mis personajes se muevan en un espacio amplio, que no oprima al lector. Digamos que soy un enamorado de Madrid.

¿Y por qué no Murcia?

Mis primeros cuentos, que escribí con veintitantos años, sí se desarrollaban en Murcia, en el arco mediterráneo y un ambiente muy levantino.

¿Qué prefieres fútbol o cine?

Mi padre era del Real Madrid y de él he heredado la pasión por los libros y el fútbol. De niño no había televisión y me llevaba a ver al Murcia, al Imperial o a los juveniles los domingos por la mañana. Recuerdo con mucho cariño aquellos años. El cine fue un descubrimiento a los 16 años. En la España franquista no había información sobre cine. Con los comienzos de la tv descubrí la figura del director de cine y tenía que intentar colarme para ver películas... siempre había un portero que te dejaba pasar. Aunque en realidad, la afición al cine creo que se la debo a Claudia Cardinale y a otras actrices y actores como Henry Fonda, John Wayne o Marcello Mastroianni.

¿No te has planteado nunca escribir un guión para cine?

No, nunca. Lo que si hago en mis estancias en Madrid es localización de exteriores para mis novelas. Cuando paseo por Madrid siento que me acompañan mis personajes, es como si los viviese directamente como espectador.

¿Cómo recuerdas tu etapa como profesor universitario?

Lo fui desde el 76 a 2011. Recuerdo sobre todo a los alumnos y alumnas. He sido muy ácrata en mis clases, lo he pasado muy bien. Año tras año yo cumplía uno más y ellos seguían teniendo siempre 20 años, así parecía que no pasaba el tiempo.

¿Te interesa la política. Cómo ves el futuro de España?

Me interesa muchísimo, tanto como no me gustan los políticos. Si no lo pienso soy optimista... el ser humano sale de todo, pero si lo pienso... entonces soy pesimista. En estos últimos cuatro años ha triunfado la mezquindad.

De puño y letra: "En un lugar de La Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme, no ha mucho tiempo que vivía un hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor".

Grafoanálisis de Pablo Alzuagaray. La letra tipo de Pedro revela su naturaleza de visionario. Tal arquetipo de personalidad innata se caracteriza por su gran capacidad intuitiva, la cual le conecta con el mundo de manera espontánea y

vivaz. Su mente inquieta le incita a explorar siempre nuevas posibilidades, nuevos caminos aún no trazados. En sus pensamientos gusta de ´adelantarse´ al futuro concreto; tal vez su sentido de misión en la vida sea servir de ´faro´ a las nuevas generaciones.