Cada vez que Mabel Lozano se coloca detrás de una cámara, es difícil que al espectador no se le pongan los pelos de punta. Tras dejar atrás su faceta como actriz y presentadora, se embarcó en la dirección cinematográfica, que le da la oportunidad de denunciar realidades que, como asegura, superan con creces la ficción. Así lo demuestra su último documental, Chicas nuevas 24 horas, que presentó ayer en Cartagena con motivo de una exposición en el Museo Regional de Arte Moderno (Muram).

La exposición está basada en el documental de Lozano e incluye una selección de fotogramas, así como fragmentos del documental y se pude visitar en el ático del museo hasta el 18 de septiembre.

Chicas nuevas 24 horas, cuyo comisario es Juan Nicolás, denuncia la compra y venta de mujeres y niñas para su explotación sexual y ha sido realizado en colaboración con Fundación Cepaim y con el apoyo del ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.

Las fotografías seleccionadas para la muestra son imágenes del viaje-rodaje del filme, que pasa por Argentina, Perú, Colombia, Paraguay y España, y conduce al visitante a un mundo clandestino de gran dureza. Además, cada fotografía está acompañada de un texto que retrata personas y situaciones que giran en torno a la explotación sexual.

Tanto el documental como la exposición itinerante, como ha explicado Mabel Lozano en anteriores ocasiones, se centra nuevamente en la trata, pero poniendo el foco ahora «en un negocio que genera al año cerca de 30.000 millones de euros y que sólo se lucra de una cosa, que es el cuerpo de la mujer y de la niña». Mucha gente piensa: «Gracias a que nosotros pagamos, ellas viven y están muy equivocados».

«Mi último trabajo -asegura la directora- lleva a la reflexión. Yo como ciudadano, ¿qué puedo hacer? Pues saber que un porcentaje muy alto de mujeres que ejercen la prostitución en nuestro país son víctimas de trata, para no ser cómplices y mirar para otro lado. Pensamos que la esclavitud del siglo XXI ocurre en países subdesarrollados. Y sí, en esos países es donde se 'caza' a las mujeres, pero donde son explotadas es en el nuestro». «En España -lamenta- cada vez hay más demanda de mujeres jóvenes, que tienen rostro de niñas, se paga por mantener relaciones sexuales con menores, que vienen engañadas con la esperanza de encontrar un trabajo, una oportunidad, una vida digna... Y no podemos cerrar los ojos».

«¿Por qué escribo realidades y no ficción?», dice Lozano que le preguntan a menudo, «porque yo como guionista sería incapaz de escribir tanta maldad».

La directora general de Bienes Culturales, María Comas, quien asistió ayer a la presentación junto a Nicolás y el director estatal de la Fundación Cepaim, Juan Antonio Segura, agradeció la labor de Mabel Lozano para concienciar a la sociedad y destacó que la exposición del Muram se completará con visitas guiadas y talleres para público de diferentes edades y dirigidas a fomentar la responsabilidad social.

Asimismo, se realizarán actividades formativas como charlas y visitas, para las que la Fundación Cepaim ha elaborado una guía didáctica. Las visitas guiadas se podrán concertar llamando al teléfono 968 501607.