Los cartageneros Ayoho -Fran (voz), Lalo, (guitarra y voz), Nacho (guitarra y voz), Javier (teclados y arreglos) y Antonio (percusión)- vienen pegando fuerte tras su victoria en el Vodafone Yu Music Talent 2014. Ayoho es una palabra que utilizan los indios de la frontera de Canadá y significa 'respeto'. Se lo han ganado ampliamente con su elegante y delicada puesta en escena, con un sonido que nace de la conexión entre el indie y el folk, y con canciones como The Frontier o The End pertenecientes a su primer disco, Deference & Wonder: música independiente con trazo acústico, que bebe de distintas fuentes musicales, desde Chet Baker a City & Colour, Ben Howard o Linkin Park. Se espera mucho y bueno de ellos. Hoy hacen la presentación oficial del disco en su ciudad, acompañados por los murcianos Dracma, un dúo de productores cuyas sesiones giran en torno a un ecléctico Tropical House.

¿Cómo fue la historia de presentaros y ganar el concurso Vodafone?

Pues es curiosa. Lalo escuchó por casualidad en Los 40 que existía el concurso y envió una maqueta recién salida del horno sin muchas pretensiones. Eso fue en febrero; las votaciones empezaban en octubre. Lo olvidamos por completo, y nos dimos cuenta cuando las votaciones estaban muy avanzadas. Teníamos dos opciones, o esforzarnos a muerte para conseguir votos y pasar el corte o rendirnos, y elegimos la primera. Pasamos entre los 50 primeros, y después el jurado nos eligió para disputar la final en Madrid con otros 3 grupos. Fue algo mágico para nosotros.

¿Qué canción enviasteis al concurso?

Enviamos una primera versión de Blank Walls, recién compuesta y recién grabada.

¿El público de Cartagena os apoyó? ¿Habéis tocado mucho en Cartagena?

Quizás esa primera maqueta no tuvo demasiada acogida, pero el día de la final muchísima gente de la tierra se volcó para votarnos, y nos dieron el voto del público, que fue clave para ganar el concurso. Estamos agradecidísimos por ello. Hemos tocado en La Noche de los Museos, donde compartimos escenario con Noise Box, en la apertura de La Mar de Músicas, y nos subimos al escenario en Mr. Witt en acústico para empezar a mostrar un poco el disco. Este viernes comenzamos gira en la Sala Underground; nos hace mucha ilusión.

¿Hasta que punto se puede decir que sois una rara avis en Cartagena?

Bueno, en Cartagena y Murcia siempre ha habido buena música. Ejemplo de ello son Nunatak, Los Últimos Bañistas, los Stuffs? Hay muchos nombres. Y para grupos de Murcia no tendríamos papel suficiente para la lista. Es algo genial.

¿Cuáles eran vuestros antecedentes musicales? ¿Por qué montásteis Ayoho?

Venimos todos de diferentes proyectos. Nuestro antecedente más inmediato fue post-hardcore con el grupo My Last Sundown. Montamos Ayoho porque queríamos hacer otro estilo de música. Nos apetecía hacer otra cosa. Y lo hicimos. El proyecto empezó sin ninguna pretensión, pero se nos fue un poco de las manos y seguimos la inercia.

Ayoho, nombre extraído del poema Antropología de Javier Marín Ceballos, ¿cuál es el concepto que encierra? ¿Conocéis al autor?

Significa respeto y asombro. Es la palabra que los indios de la frontera de Canadá utilizan para dar la bienvenida a la primavera. Fran conoce al autor, y lo primero que hizo tras ganar el concurso fue llamarle para contarle que nos llamábamos Ayoho y que se había liado un poco (risas).

¿Por qué habéis titulado Deference & Wonder a este primer trabajo? ¿Qué podéis contar de la grabación y el trabajo del productor? ¿Estáis contentos con el resultado?

El título es 'respeto y asombro, el concepto que encierra nuestro nombre, y nos parecía una forma coherente de titular el disco por lo que significaba, por cómo había llegado? Sobre la grabación solo podemos seguir flipando. Carlos Sainz es un productor brutal, además de una genial persona. Es un amigo que nos llevaremos siempre. La experiencia nos hizo crecer mucho más rápido de lo normal; estamos muy contentos.

Por la cuidada producción, la ejecución de los temas, da la sensación que este disco es un trabajo muy ambicioso para ser un primer disco. ¿Cuáles son las expectativas puestas? ¿Cómo describiríais el sonido del disco?

No sé si realmente tenemos más expectativas que tocar, disfrutar y decir cosas con nuestra música. Vivimos al día, trabajamos muchísimas horas porque nos apasiona. Lo que tenga que venir, vendrá. El sonido del disco está muy cuidado. Tuvimos mucho mimo grabando y Carlos hizo un trabajo brutal. Suponemos que tiene algo de folk, algo de atmosférico, sonido acústico? Es difícil describirlo para nosotros.

Hay un aire de nostalgia y melancolía en algunas de vuestras canciones. ¿Es un reflejo de vosotros?

Claro, las canciones son? no sabemos si autobiográficas de un modo estricto, pero sí coherentes con nosotros. Son una forma de expresión que pretendemos que sea lo más pura posible. Son trocitos de las cosas que sentimos y pensamos.

Me llama la atención que una de vuestras influencias sean los progresivos Porcupine Tree. ¿Qué habéis incoprorado de ellos a vuestra música?

Creemos que la sensibilidad. Steve Wilson es un maestro. Cuando suena, callamos, aprendemos y disfrutamos.

Habeis tocado en locales grandes como La Riviera, Razzmatazz. ¿Qué tal la experiencia? ¿Impone?

Sin duda impone, pero nos lo tomamos como un regalo y lo disfrutamos como tal. Las salas son alucinantes, la gente fue alucinante, los artistas se portaron genial con nosotros? No se nos va a olvidar nunca.

¿Qué ha sido lo más emocionante que os ha pasado de momento como grupo? ¿Y la peor experiencia?

Nos quedaríamos con la final del talent, el concierto del Welcome, que fue otro regalo impresionante, y el de Razzmatazz en Barcelona. Ninguno sabe explicar muy bien lo que pasó, pero esas noches hubo magia en todos sitios. La peor experiencia? Creemos que no hay una peor experiencia. Hay momentos duros. Intentar sacar adelante una banda no es sencillo. Sacrificas muchas cosas. Lo bonito es que el feedback que te da compensa cualquier cosa. De todo se aprende. Las dificultades te curten, y en este mundillo es fundamental.

¿Hay otras referencias no estrictamente musicales en vuestras canciones? (Freedom, por ejemplo, está inspirada en la película Los juegos del hambre)

No hay referencias explícitas. Fran escribe poesía, Nacho es un apasionado del cine. Esas cosas influyen porque te dan una perspectiva estética diferente y enriquecen lo que haces. Está ahí aunque no se vea.

¿Tenéis la sensación de que va todo bastante despacio?

No exactamente. Para ser sinceros, 2015 es un año en el que todo fue increíblemente deprisa. Ahora, el ritmo es menos frenético, pero es más natural. No tenemos miedo de ir despacio. Queremos hacer las cosas bien y disfrutar mucho de todas las partes del proceso.

Aunque no os vio mucha gente, menudo concierto nos regalasteis en el Welcome universitario, donde compartisteis escenario con Crystal Fighters. ¿Cómo lo vivisteis vosotros?

Como te decimos, fue un regalo. Un escenario así y la posibilidad de tocar en él es un regalo. Nosotros salimos sin complejos a disfrutar lo que íbamos a hacer, y creo que lo conseguimos. Fue una experiencia brutal.

En el Welcome dejasteis algunos temas nuevos. ¿Por donde vais ahora? ¿Calculáis que podréis tener disco a finales de 2016, o sería ya para 2017?

No tenemos una fecha fijada. Depende de cómo fluya la composición, la producción y las exigencias del calendario. Algunos temas están avanzados, pero hay que trabajar mucho aún.

En abril, en Microsonidos con Jacobo Serra: cartel de grandes esperanzas. ¿Qué planes tenéis para los próximos meses?

Ahora mismo el objetivo principal es la gira, tocar todo lo que podamos y mover Deference & Wonder donde nos dejen. Paralelamente seguimos trabajando en nuevos temas. Para final de año podréis ir vislumbrando cosas nuevas.