La amistad y similares inquietudes creativas han unido las obras de dos noveles artistas de nuestra Región. En la sala Léucade, que dirige Sofía Martínez, se puede visitar hasta el día 5 de enero la muestra Horas de luz, que acoge cuadros pintados por Carlos Montero (Murcia, 1971) y esculturas realizadas por Diego Inglés (Cartagena, 1980), donde el hilo conductor de este proyecto es la «fuerza y la intensidad de la luz», según ambos artistas, quienes se conocieron hace más de una década siendo estudiantes en la Escuela de Artes y Oficios de Murcia.

Años después, coincidieron desarrollando su labor de escultores en una empresa dedicada a la creación de parques temáticos.

Carlos Montero presenta en Léucade un total de 14 obras recientes, pintadas en óleo sobre tabla y sobre lienzo. Paisajes urbanos convincentes de lugares reconocibles de Murcia, Madrid y Nueva York, son revisados con carácter realista, a pesar de que varios de los cuadros integran una aportación moderna, al ir la mitad de la tabla pintada en un solo color degradado, con lo que se fusionan figuración y abstracción en una misma pintura, perfilando obras con un resultado novedoso que interesa a espectadores de diferentes edades.

La participación de Diego Inglés, técnico superior en Artes Aplicadas a la Escultura, en esta exposición consiste en incluir cinco esculturas que exhibe junto a los cuadros de Montero. Las piezas de Inglés «describen emociones», indica el autor, a la vez que va enumerando la variada selección de materiales elegidos para construir cada escultura.

«He utilizado hierro, acero, piedra natural, madera, alabastro, resinas, piedra artificial, cartón, paja€ y materiales reciclados, como la hélice oxidada de un barco y el manillar usado de una bicicleta», nos descubre el artífice de las piezas. Las líneas de trabajo del joven escultor resultan eclécticas, pero siempre concebidas desde una profunda reflexión y con la mayor desinhibición artística.