Muerdo entiende la música como un viaje en el que se recoge y se comparte el latido de los pueblos. Y la mayoría de las canciones de este disco las compuso en el cono sur; tienen influencias musicales de esos lugares del mundo y de poetas como Benedetti o Gioconda Belli. Cuando decidió titular el disco Viento Sur, se acordó de la canción que popularizó Mercedes Sosa. Con un lenguaje directo y valiente, Muerdo apuesta por no quedarse inmóvil al borde del camino, que diría Benedetti.

Viento Sur es el nombre de una revista política. ¿ Tiene algo que ver el título de tu disco? ¿Qué significado tiene?

Me di cuenta después de haber titulado el álbum de que existía una revista política con el mismo nombre. Por su línea ideológica deduzco, aunque nunca la he leído, que tiene mucho que ver con la conciencia del sur explotado por el norte, el sur de Europa, el sur de América? En ese sentido hay alguna conexión con mi disco, aunque yo titulé así a la criatura porque la mayoría de los temas los compuse en el cono sur, y tienen influencias musicales de esos lugares.

Dos de los términos más recurrentes en tus canciones son 'camino' y 'un mundo nuevo'. ¿Es deliberado?

No es deliberado. Al fin y al cabo, la música, las canciones, los discos? no dejan de ser fotografías, o radiografías de ese constante caminar que es perseguir un sueño, un ideal, ya sea individual o colectivo, al que podríamos llamar fácilmente el 'mundo nuevo'.

¿Cómo fue la gestación? ¿Dónde fue la grabación del disco?

El disco comenzó a gestarse durante la gira del anterior álbum, especialmente en los meses de noviembre y diciembre de 2014, en un viaje que realicé a Argentina y Chile. Allí comenzó a tomar fuerza el concepto y llegaron muchos de los temas. En marzo de 2015 decidí que quería grabarlo junto a Carlos Manzanares en su estudio de Benicarló (Castellón), y nos pusimos a ello, aunque la grabación se vio interrumpida por otro viaje a Latinoamérica, lo que nos hizo retomar la grabación en julio hasta concluirla finalmente a comienzos de otoño. Casi todo lo grabamos en Benicarló, aunque llegaron pistas desde Valparaíso, Granada, Barcelona, Madrid...

«Salgo a caminar por la cintura cósmica del sur», cantaba La Negra. Parece que te lo has tomado en serio. ¿Qué nos puedes contar del proyecto Terra tour, de esos viajes?

Viajar es lo que más te abre la mente; dicen que un año de viaje equivale a siete años de vida estática. Con Terratour recorrí 12 países de América Latina en apenas dos meses. Fue un proyecto que no me aportó lo que me esperaba, y aun así me dio otras cosas que me hicieron crecer muchísimo. Eso es el viaje al fin y al cabo. Me quedo con las sonrisas de los niños en Chiapas, la aldea Nueva Libertad de Guatemala, con el hermoso concierto del Foro Alicia en el DF, o con los chavales de un reformatorio de Medellín.

Cada vez parece que te sientes más cómodo mezclando ritmos y sonoridades apegadas al folclore y a la tierra (el son, la chacarera), pero también a géneros urbanos como el hip hop, el funk. Hay quien piensa que Muerdo representa ese eslabón existente entre la canción de autor y la world music. ¿Tú que opinas?

Me siento cómodo en esa definición porque me siento de alguna manera hijo de ambos géneros, aunque creo que, en cuanto a música, deberíamos prescindir cada vez más de las etiquetas.

La colaboración internacional viene de mano de la artista chilena Pascuala Ilabaca, con la que has grabado una suerte de soleá multicultural que versa sobre la migración y la contaminación de los océanos, dos temas de máxima actualidad. ¿Cuál es tu posición al respecto?

Paisaje submarino es una especie de metáfora constante que toca varios temas, entre ellos el de las personas que se juegan y pierden la vida cruzando el mar tratando de buscar una vida mejor. También aborda el de la contaminación de los océanos. Creo que las instituciones y cada uno de nosotros como individuos deberíamos tomar, respecto a estos y otros temas, actitudes verdaderamente comprometidas y solidarias.

No quedarse inmóvil al borde del camino, que diría Benedetti. En este tercer disco has echado mano de poetas latinos como Benedetti o Gioconda Belli, y la colaboración de la poetisa María Ruiz Faro. ¿Qué buscabas?

El hecho de incluir trozos de poemas en mis canciones, tanto en directo como en estudio, es algo que vengo haciendo a menudo desde hace algún tiempo. Se trata de acercar la poesía a mi publico, y acercar la música al publico de la poesía, aunque por encima de estas dos cosas, uno siempre busca completar en sentido las cosas que escribe con cosas que han escrito otros.

En Canto pal que está despierto introduces una cita del poema de Benedetti Por qué cantamos. ¿Y tú por qué cantas?

Por pura necesidad. Me lo he preguntado muchas veces, y la respuesta siempre es la misma. Canto por pura necesidad de expresar lo que me pasa.

«Cambia lo superficial, cambia también lo profundo, cambia el modo de pensar, cambia todo en este mundo...» ¿En qué ha cambiado Muerdo? ¿Cuáles son tus prioridades ahora?

Muerdo como proyecto está evolucionando y creciendo constantemente, enfrentándose a nuevas situaciones que lo devuelven de alguna manera cambiado. Lo mismo me pasa a mí a nivel personal, que ando creciendo y evolucionando con el proyecto. Las prioridades siguen siendo las mismas, contar lo que percibo, lo que siento, hacerlo con una mayor riqueza textual y musical en cada disco, y a ser posible llegar con cada trabajo a un mayor numero de personas.

En la intro de Viento Sur, lo primero que se escucha son voces de distintas procedencias. ¿Qué objeto tienen? ¿O es un mero recurso estético para mostrar lo variado del disco, de tus viajes?

Cuando decidí titular el disco Viento Sur me acordé de la canción de Mercedes Sosa, y decidí utilizar algunos versos para construir la intro del disco. Entonces me fui a Marruecos a dar unos talleres, y comencé a grabar a los niños recitándolos, y posteriormente hice lo mismo con algunos amigos en Colombia. La idea es reflejar la multiculturalidad que envuelve al disco en todos sus aspectos.

¿La influencia latinoamericana ha marcado este disco más que ningún otro?

Diría que sí. El disco anterior había estado influenciado principalmente por la música cubana, pero en este se aprecian un conjunto de ritmos de todo el sur del continente americano.

Lo que ha crecido Lejos de la ciudad desde aquella versión con acústica que te escuché. Comienza con un grito de resistencia de la comunidad indígena. ¿Te solidarizas con sus reivindicaciones?

La lucha indigenista me parece una de las claves de nuestro tiempo. Frente al capitalismo atroz, la destrucción de la naturaleza, la desmemoria de nuestras costumbres? los indígenas están aquí hoy para recordarnos quiénes somos, cómo se puede vivir de una manera más saludable, sostenible, feliz. Por eso hay que mirar hacia ellos.

Sonidos tiene un aroma funky, más urbano. Desde la Murcia 'tropikal' buscando sonidos de todas las partes del mundo. ¿Quién rapea en la canción?

Sonidos habla de todos esos viajes por ciudades que son especiales para mí, pero vuelve siempre a Murcia, a la plaza de la Universidad, esos lugares que nos han visto y nos continúan viendo crecer, caer, reír, volver, partir? El rapero que colabora en este tema es el murciano Dani Aguilera.

Paisaje submarino arranca con una llamada a la oración desde la mezquita. ¿Cuál es la intención?

La intención es ambientar y rendir homenaje también a la espiritualidad en cualquiera que sea su tipo o forma. Me asusta y me repugna la islamofobia que estamos viviendo en los últimos años y sobre todo meses. La voz femenina que me acompaña es de Pascuala Ilabaca, una grandísima artista Chilena con la que he compartido escenario tanto allí como aquí, recientemente en La Mar de Musicas de Cartagena.

Gallo negro gallo rojo (Sánchez Ferlosio), que llevas cantando desde el principio de tu carrera, has terminado por grabarla. ¿Qué representa, qué tiene para ti esa canción?

Para mí, Gallo negro gallo rojo es una canción muy especial, cargada de muchos sentidos, y que, como bien dices, me acompaña desde el principio. Tenía que grabarla. Además forma parte de mi pequeño homenaje a la canción de autor que vengo practicando en cada disco, y Chicho Sánchez Ferlosio era una figura que no podía dejar de reivindicar.

El disco contiene además un remix de Chalart58, quien fuera componente de la banda barcelonesa La Kinky Beat, y DJ Panko, de los desaparecidos Ojos de Brujo. ¿Claridad remix es una apuesta por llevar tus canciones a la pista de baile? ¿Se ha quedado un poco corta de bpms?

Más que llevar mis canciones a la pista de baile, la idea era sorprender con otro registro distinto al habitual y experimentar en un tipo de música que me encanta, que es todo lo que tiene que ver con la electrónica. Voy a seguir trabajando paralelamente en este sentido con grandes como DJ Panko.

Has participado en un vídeo de Juventud sin Futuro junto a Juan Diego Botto, Íñigo Errejón, Miguel Ríos... ¿Cuál era la intención?

Denunciar la violencia machista desde la masculinidad. En las campañas habituales suele mostrarse todo desde la mujer, pero en este vídeo la idea era que cualquier hombre pudiera ver identificado en sí mismo las actitudes machistas que cada día llevamos a cabo sin darnos cuenta.

¿Qué banda te acompañará en la presentación?

Martin Brhun, que ha grabado las percusiones del álbum, vendrá con la batería; Cary Rosa Varona desde Cuba con bajo y contrabajo; Iker García Kelis a la guitarra, El Ninho Trompeta y un servidor.