La facturación neta de la música en vivo en España a lo largo de 2014 fue un 9,76% mayor que la registrada en 2013 y supone el primer dato positivo para el sector en cuatro años, si bien los promotores han celebrado con cauto optimismo este registro. «Se explica por el hecho de que en 2013 se tocó fondo, por el impacto que han tenido giras de estadios como las de One Direction o Rolling Stones, que no se dieron durante el primer año con el IVA al 21% y por la mínima recuperación del consumo que está experimentando el país», argumentó en nota de prensa Pascual Egea, presidente de la Asociación de Promotores Musicales (APM).

El incremento de la facturación neta es el dato más sobresaliente de los que se incluyen en el VI Anuario de la Música en Vivo, con la esperanza de que 2015 sea «un año para volver a la normalidad».

«Esperamos que podamos dejar atrás el ivazo y volver a una situación de normalidad que permita relanza la industria después de unos años en caída», señala Egea en el mismo comunicado. Esta petición llega solo unos días después de que la APM, en alianza con otros actores destacados del sector, convocaran un Día sin Música para el 20 de mayo. Según los datos recogidos en el anuario, entre las locomotoras de la música en vivo de 2014 destacó el caso de Malú, que reunió a 450.000 espectadores en 60 conciertos; Extremoduro (306.800 espectadores en 39 conciertos) y David Bisbal (191.800 espectadores en 28 conciertos).

One Direction se alzó como la referencia internacional de mayor calado en el último año, con 127.000 espectadores en 3 conciertos, seguidos por Rolling Stones (54.000 espectadores en un concierto). Asimismo, los festivales volvieron a arrojar algunos de los mejores datos para el sector de la música en vivo. El Arenal Sound (250.000 espectadores en 6 jornadas) compartió esta vez su corona con el Rototom Sunsplash de Benicàssim (Castellón), aunque la cita levantina reunió ese número de personas en 2 jornadas más. Por detrás se situaron el Viñarrock (200.000 asistentes), el Primavera Sound de Barcelona (190.000) y, empatados con 120.000 personas, el Festival Internacional de Benicàssim (FIB) y el BBK Live! de Bilbao.