«Lee, suscribe, disiente, opina». Es solo uno de los mensajes que reciben al visitante del pabellón número 2 del Cuartel de Artillería de Murcia, recién reconvertido en espacio creativo y que promete ser una puerta abierta al pequeño emprendedor. El festival Habla 1.0 es eso. Un gran escaparate a la creación, donde tienen cabida todo tipo de trabajos manuales y de reciclaje, proyectos innovadores para bolsillos low cost en estos tiempos de anemia económica. «Hay gente que ejerce su actividad en el garaje de su casa, aquí, se les proporciona un espacio de trabajo y una conexión entre ellos», afirma Marta López-Briones, directora del Cuartel. En 'Mundo Pánico' hacen poesía visual. Así, un fular de seda se convierte en una pequeña obra de arte, gracias a los originales estampados que hace Salud Durán, o los imanes que ilustra el poeta Antonio Sánchez, que se convierten en 'Poemas para nevera', con una singular mirada que se aleja de la fotografía tradicional.

Susana Martínez dirige 'Corazón de lana', un espacio en el que trabaja este material con la ayuda de una simple aguja y, gracias a una destreza y a una habilidad sobresaliente con sus manos, lo convierte en originales prendas de vestir, complementos o muñecos para los más pequeños.

En ´Apartamento 113´ personalizan lámparas fabricadas con jardineras galvanizadas, que portan románticos mensajes como «¿Te he dicho que te quiero?» y que quedan proyectados en la pared. Cuestan alrededor de 60 euros. Pero, sin duda, la mejor manera de incentivar la cultura hand made (hecho a mano) la aporta ´Crealoo´, que pone a disposición de los interesados su propio kit de manualidades: figuritas de papel (4 euros), taller de encuadernación (12,5 euros) o el kit Crealoo (20 euros), que ha vendido más de 300 unidades a través de Internet y gracias al cual los interesados pueden fabricar sus propios regalos. Una iniciativa muy original para estas fechas navideñas.

Un caldero murciano

Para los amantes de la gastronomía, Caldos del Mediterráneo acerca a los paladares más selectos el tradicional caldero murciano en un bote que incluye todos sus ingredientes y que solo tiene que ponerse al fuego y añadir el arroz, como no podía ser de otra manera, con denominación de origen de Calasparra. En unos simples pasos, el cocinero más patoso puede elaborar este delicioso plato de la cocina murciana, sin tener que recurrir a las recetas de la abuela. Habla 1.0 es un soplo de aire fresco para mentes inquietas y para manos hábiles.